Ha sido
un mal día
me has
herido,
sin razón
y por ello
la infinita
tristeza
de lo
irreparable.
Siempre
te he dicho
cuida
tus palabras,
serán ellas
las que
te condenen.
Me has mentido
y con ello
me pregunto
¿Qué has ganado?
Como seguir
cuando la duda
puede replicar
aun,
sin causa
alguna,
en forma repentina.
Déjame, necesito
dar ahora
un paso
al costado,
alejarme de ti,
quizás
sin retorno.