Donde estas
mi bonita dama
de Playa del Carmen,
donde nos
conocimos
un verano
y corría contigo
cada atardecer,
por la desierta
playa.
Conocí por ti
la vitalidad
y sensualidad,
de tu tierra
azteca,
de aquellos
primigenios,
cuna de
la civilización
americana.
Dos hoyuelos
en tus mejillas,
enmarcaban
una risa blanca,
bonita trigueña
de mirada intensa,
que con ella
derribabas
cualquier prejuicio.
Que pasión,
ponías en
cada abrazo,
en cada beso
cuando nos
encontrábamos.
Volveré,
no se si
este verano,
pero deseo
ver un nuevo amanecer,
solo contigo.
Qué amor tan bonito!
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Muchas gracias, bella. Un cálido saludo.
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❤
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Nuevamente gracias; leal amiga y mejor escritora. Aunque no te incomode; una humilde opinión, creo que no debes rechazarla. Un cálido saludo.
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Jamás rechazo una opinión siempre q venga desde el respeto.. por qué lo dices??.. 🙂
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Hola Mamen; allí debió decir “aunque te incomode” y fue por aquella vez; que cuando te señale como escritora, me contestaste que aun no te considerabas a esa altura. Y lo que quise, fue ratificarte lo que pienso. Un abrazo de luz, amiga.
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Ah, no entendí.. Muchas gracias por explicármeloy gracias por el halago 😘❤🌸
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