Sabes, no puedo ni debo comprender
tu locura de que no te intereses en nadie.
Que creas que en el mundo, tu ombligo es centro
y pasas tu vida mirándolo en vano,
pensando en que como seguirás manipulando
todo aquello que solo a ti, te produzca beneficio.
Y todo lo otro, aquello esencial para la vida?
O soy un demente pensador que cree
que el amor, la alegría, la solidaridad
y todo aquello que compartimos a veces
sin saber con quién, pero plenos nos hace
es solo una quimera para pocos.
Es tu vida, y con ella puedes hacer lo que quieras.
Pero no sea cosa, que en un momento
cuando te detengas y dejes de mirar tu ombligo,
te lamentes de todo aquello, que has perdido.
¡Cuánta razón! Me recordaste a un poema de Benjamín Prado que dice que aquel que solo piensa en sí mismo, no piensa en nada. Y se lo pierde todo, añadiría yo. Saludos 🙂
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Egoísmo o miedo? A veces es difícil de entender…
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Sabes es no saber vivir en la incertidumbre de los cuerdos. El que para si, todo lo quiere…es un “loco” que solo tiene certezas por lo que posee. Un cálido saludo.
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