Solo una experiencia personal…

Como cada noche e infaliblemente mi mente no descansa. Hace días nos escribimos con alguien a quien considero virtual amigo con residencia en Barcelona; ciudad a la que antes de la llegada de la pandemia de Coronavirus, hacia de ella mi puesto de cabecera para realizar mis distintos itinerarios por Europa. He sido un privilegiado y Dios me ha dado más de lo que realmente como mortal, merecía.


Hablábamos de las secuelas que por lo bajo las personas comentan entre sí,cuando han sido contagiado por el virus del COVID y luego de sufrir distintas patologías han tenido la bendición de volver a su “vida normal” de cada día. Han sido realmente bendecidos.

Me preguntaran el porque de los tildes o comillas… Es que ya la vida que se vive -escribo solo de mi persona- ya ha dejado de ser lo normal como fuera en el pasado.


Si bien estuve aislado en el 2020 -el peor año, por ser el primero- en donde el mundo asistía a algo desconocido que dio lugar a una atroz competencia en cuando a cuantificar el número de contagiados y fallecidos por cada país, junto al colapso de la mayoría de los servicios de salud.


Han pasado casi dos años y un resfriado continuo mas que molesto me acompaña.

Le escribía a este amigo que ha tenido síntomas posteriores a su alta médica del COVID que nos tenemos que ocupar y alejarnos de las secuelas, ya que de lo contrario vamos a ser fagocitados por las mismas.


Hace aproximadamente seis meses cada noche sin excepción comencé a recordar sueños vividos bien guionados o argumentados, que si me despertara para escribirlos permitirían escribir un capitulo por día de una novela, narración o ensayo de terror, y lo que no puedo evitar.

Obviamente, consulté con profesionales de la salud -neurólogos- y estudios mediantes -RMN Cráneo y una Polisomnografía- aguardaba con cierta ansiedad la semana pasado su diagnóstico. Me sentí defraudado al recibir la información que neurológicamente solo se observaba una apnea de sueño.

Es decir, que los recuerdos de los sueños recurrentemente no poseen una base neurológica. La profesional me sugirió visitar a un neumólogo o psiquiatra ¿?


La ultima noche recuerdo haber soñado con uno de mis nietos; Nicolás de 6 años. Íbamos en mi auto, hasta un lugar que conozco y que es el cruce de una Avenida llamada General Paz que lleva un trafico intenso desde el norte al sur, alrededor de la Ciudad de Buenos Aires.

Bajamos en un parque. Me pidió que le alquilara un pequeño auto a batería, lo que hice. Al rato observe que estaba compitiendo con otro niño, hasta que desaparecieron de mi vista. Enloquecí, llamándolo a los gritos.

Cuando quise ir a buscar el auto, me encontré no con una de las calles que conozco del lugar, sino un acantilado por el que con esfuerzo tuve que escalar…En ese momento como es costumbre cuando me veo en una situación limite, mi propia voz me dijo ¡ Desperta, es solo un sueño!


Este breve relato solo tiene como objetivo, decirle a quien tuvo Covid que si observa un sintoma o comportamiento alejado de su vida pre covid, realice sin dudar la o las consultas médicas sin dudar un instante. Las disculpas por el tiempo que le ha demandado leer estas líneas. Saludos y un muy buen domingo.

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