Permíteme…

No te
ha agradado
nuestra
ultima charla,
quizás por
ser tan directo
al decirte
que mi alma
te pertenece
desde hace
tiempo,
tiempo en que
vos y yo
vivíamos
relaciones
tambaleantes,
anodinas,
que se iban
apagando
como la luz
mortecina
de una vieja
lampara.


Si sólo
me creyeras,
si no fueras
tal trozo de hielo
que utilizas
como coraza
de defensa,
porque no deseas
salir lastimada,
y me permites
que les pida
a tus ojos
color mar
que me miren
tan solo una vez,
te darías cuenta
que una
caricia tuya
avivaría el rojo
de las fogatas,
imperecederas
de ese amor
que tanto vos
como yo,
habremos de
transformar
de roja rosa
en orquídeas
que engalanarán
nuestras noches,
bajo un murmullo
de estrellas
alborotadas
al ver en nosotros
ese amor único
transformado
en eterno.

Imagen de portada: Gentileza de Pinterest

Demonios de la noche

No hay noche alguna,
en que mis demonios
dejen de visitarme,
trayendo historias
siempre irrepetibles,
y eso solo es parte
de lo que me mantiene
tenso y despierto.

Sueño melancolías
por haberte perdido,
se agita
mi corazón
llora frenético,
con la esperanza
perdida
y sin oponer
resistencia,
como
un navegante
que perdiendo
su brújula,
la bruma
solo trae consigo
decenas de
desvarios.

Imagen de portada: Gentileza de Pinterest

Grises

A veces,
solo a veces
por la razón
que ha pasado
ya demasiado tiempo,
la melancolía
se me acerca
y me abraza,
recordando aquella
tu injusta partida.

Hendidura
de mi alma
que vuelve
cada tanto
a mi como
la esperanza
que aquello
que pudo
haber sido,
pero aborto
el destino
porque la ceguera
de tu padre,
resulto mayor
que tu débil valentía
al oponerte.

En época
de redes,
a veces
continuo
y me atrevo
a buscarte,
me sorprende
que a pesar
de haberte
encontrado,
tu sitio
luce vacío,
como diciéndome
que no insista,
disfrazandote
de amor imposible,
vuelvo a pensar
que quien me visito
alguna vez
solo yo
puedo ver y recordar.

Imagen de portada: Gentileza de Pinterest

¿Será así?

Alguien
en voz alta
lanzó aquella
frase
memorable,
el amor verdadero
es solo
el amor imposible.

No puedo negarlo
ya que con ella
coincido plenamente
¿quien en algún
momento no amo
a alguien en quién
creyó encontrar
el amor verdadero,
sin poder lograrlo?

Porque
esa sensación
única y sublime,
no correspondida,
sin embargo
cada tanto,
no importa
el tiempo
que ha pasado,
vuelve a mi
en recuerdo
con aquel rostro
bello e inalterable
de su juventud.