«Peregrino transparente», la nueva novela de Juan Cárdenas

El autor colombiano se pregunta sobre los orígenes de su país a través de la historia de un grupo de especialistas que, en el siglo XIX, recorre zonas rurales y selváticas para describirlas. Un inglés, el pintor Henry Price, se fascina con un artista popular, el misterioso Pandiguando, y comienza la intriga. 

Una pregunta recorre toda la literatura latinoamericana. Es una pregunta molesta, repetitiva, pero inevitable. Una pregunta que hace a la literatura, que la regionaliza, también: ¿qué es Latinoamérica? Esa inquietud va tomando diversas formas nacionales en obras importantes, marcando el pulso de una indagación acerca de la naturaleza de lo latinoamericano que va de Facundo de Sarmiento hasta Conversación en la Catedral de Mario Vargas Llosa, pero que llega también a Los detectives salvajes de Roberto Bolaño: qué podría llegar a ser Argentina, cuándo se jodió el Perú, qué significa ser latinoamericano después de la represión y las desapariciones en el sur del continente, son todas variantes acerca del enigma de nuestro paisaje. Peregrino transparente, la última novela de Juan Cárdenas (Popayán, Colombia, 1978) se suma a la serie a partir del vector colombiano, territorio que dialoga con sus representaciones más características, esto es, entre Pablo Escobar y Gabriel García Márquez, entre la cocaína y Macondo. Peregrino transparente es una novela sobre las representaciones de una porción de Latinoamérica en sus orígenes, y en la pregunta que se vuelve molesta, repetitiva, pero inevitable: ¿qué sería Colombia?

Dividida en tres partes, la primera se sitúa en 1850, cuando a raíz de las gestiones del presidente de Nueva Granada (nombre hasta 1863 de parte del actual territorio conocido hoy como Colombia) se crea la Comisión Corográfica. O sea, un grupo de especialistas, que iban desde escritores hasta pintores y botánicos, cuya misión sería la de recorrer diversas zonas rurales y selváticas en pos de armar descripciones precisas que puedan servir como un elemento de conocimiento del país y también como un ardid publicitario para atraer inversores. Dirigida por el ingeniero italiano Agustín Codazzi, la Comisión Corográfica llevó adelante una tarea racional atravesada también por la mística y la aventura. Cruce que queda perfectamente expresado en el libro de Manuel Ancízar La peregrinación de Alpha (1850-1851), un trabajo de crónicas basadas en la primera expedición corográfica que retrata la geografía “humana” del centro y norte de Nueva Granada, clásico, como bien señala Cárdenas, poco visitado de la literatura colombiana decimonónica. Es a partir de estos datos reales, del libro de Ancízar y de un ejercicio imaginativo sin más, que el narrador comienza a contar las diferentes peripecias de la comisión en el recorrido de las entrañas neogranadinas, del encuentro con sus relieves y el intento por retratar (a través de descripciones o cuadros rápidamente hechos con acuarelas) las complejidades de la incipiente nación. El centro de toda esta primera parte es Henry Price, pintor inglés que formó parte de una de las expediciones y que aparece aquí perfectamente retratado (nunca mejor usado el término) entre lo europeo y lo americano, entre el catolicismo que no entiende y la fascinación por sus prácticas y, por sobre todo, su iconografía. Y es que Price, como el resto de sus compañeros, termina obsesionándose por las pinturas de un tal Pandiguando, un indio, que aparecen en las paredes de los lugares que visitan, representaciones de figuras salvíficas como la de Santa Lucía que son veneradas por los locales y que a Price le resultan mal ejecutadas. Al menos, al principio, porque el inglés comienza a preguntarse qué es lo que tiene esa pintura tan tosca y cotidiana que lleva a que las personas generen una suerte de culto a su alrededor. En Price se deposita la intriga principal de toda la novela: qué es representar algo y cómo aquello que queda por fuera de la representación es lo que alberga más peso y más misterio. Price, pintor europeo, pone en jaque todo el proyecto topográfico por esta persecución del artista “popular” y casi anónimo, el misterioso Pandiguando: se puede dibujar a esta gente, se pueden dibujar los paisajes, pero algo siempre va a quedar afuera, y eso que queda afuera quizás sea lo realmente importante.

Un cuadro de Henry Price

Luego de la segunda parte, “El jardín de los presentes”, spineatteano título a pesar suyo, que funciona a la manera de una deriva poética que aumenta el clima pesadillesco con el que cierra la aventura de Price en el primer tramo, la tercera parte retoma los viajes al interior de Nueva Granada en 1855, en una búsqueda a la manera de un western entre un “joven abogado” y el mismísimo Pandiguando, liberado de una cárcel panameña para que se sume a la Comisión Corográfica en otra de sus expediciones por su habilidad pictórica. Claro, en el primer momento de distracción, Pandiguando se fuga, y vuelve otra vez el intento por encontrar a este hombre en otra lógica persecutoria que sólo va encontrándose con las huellas del ahora llamado Tigre Negro, tal su subrenombre criminal.

Pandiguando o el Tigre Negro representa ese lugar que la Colombia en formación quiere dejar atrás: además de ser racialmente indio, por lo tanto, inferior para el consenso de la Nueva Granda —que quiere sumarse al concierto de las naciones con fuertes incentivos en el desarrollo del comercio y la explotación de recursos—, es también un artesano, alguien que pinta sin método y que es pura expresión del temple latinoamericano. Hay algo que Pandiguando puede hacer naturalmente que queda siempre sometido al silencio o a la fuga, que ni Price ni el joven abogado pueden entender.

Cárdenas logra una novela que tiene una anécdota interesante, aunque termina desbarrancándose esa construcción cuando intercala momentos ensayísticos en donde el narrador se reconoce en el presente y ve desde una mirada contemporánea los hechos del siglo XIX. Por eso es fácil encontrar el germen del liberalismo colombiano, de la lógica de explotación humana y de los recursos autóctonos en pos de llegar a tiempo al progreso: Cárdenas ve desde hoy el origen de su presente (hasta con complicados anacronismos), algo que le suma un plus ensayístico a lo que se quiere contar y que atenta contra el trabajo en su totalidad. Ese narrador-ensayista, que reflexiona a medida que la historia avanza, se permite leer en la existencia de la Comisión Corográfica el comienzo de un mundo que derivará en la Colombia del capitalismo salvaje y el tráfico de drogas, en la Colombia de maravillas de García Márquez. ¿Era necesario ese momento de opinión, sea del tipo que sea, en la historia que se cuenta? Así como el desvío de la segunda parte, muy probablemente, esos momentos fechen ostensiblemente el trabajo y terminen jugando en contra de un texto que se pregunta por el funcionamiento de la representación de Nueva Granada como pequeño ejemplo del lugar imposible de la representación de nuestro mundo por parte una máquina europea, que es la literatura o la hechura de un cuadro: por su lengua, por sus términos y por su lógica mimética. Peregrino transparente es una novela que entra en sintonía con textos de peso en la tradición local, pero que termina perdiéndose en los devaneos de un escritor que quiere decir claramente dónde está la pregunta que se hace. Cuando, a veces, la literatura se pregunta desde ese fondo de silencio que está por no estar, como lo que maravilla a los neogranadinos de los cuadros de Pandiguando. La literatura representa mejor si no dice lo que hace, y solo hace.

Imagen: Cubierta de portada de “Peregrino transparente”

FUENTE RESPONSABLE: Página 12. Argentina. Por Fernando Bogado. 5 de marzo 2023.

Sociedad y Cultura/Literatura/Novela/Colombia/Juan Cárdenas.

«La empleada doméstica es una figura tremendamente incómoda en la cultura latinoamericana, presente en ciertas clases sociales en regímenes de semiesclavitud»: entrevista con Alia Trabucco

La niña muere y lo sabemos desde el comienzo. Nos lo cuenta Estela, la empleada doméstica, sirvienta, criada, muchacha de la limpieza o nana, según el país donde estemos.

En este caso es Chile, donde es habitual el término nana, especialmente cuando se cuida a niños, aunque después de años de lucha sindical por sus derechos laborales, ellas quieran ser llamadas trabajadoras de casa particular.

Cuando Estela llega a su nuevo trabajo, la señora está embarazada de la niña, y la niña muere cuando tiene 7 años.

Estela es la protagonista de «Limpia», la nueva novela de Alia Trabucco (Santiago, 1983). Ella viene del sur a la capital para trabajar un tiempo corto como interna, es decir, viviendo en la casa de sus jefes o patrones, la señora y el señor, los dueños de casa, para hacer las tareas domésticas y cuidar a la niña.

La autora de la aclamada novela «La resta» y del libro «Las Homicidas», que cuenta historias de mujeres asesinas, entra ahora en la vida de las empleadas domésticas:

«Una figura tremendamente incómoda en la cultura latinoamericana, presente en ciertas clases sociales en regímenes de semiesclavitud como es el caso de las trabajadoras de puertas adentro, como se dice en Chile, o cama adentro, como se dice en Argentina, porque supone la suspensión de la propia vida en favor de la existencia de otro».

Alia Trabucco formará parte de los diálogos del HAY Festival de Cartagena.

¿Por qué anuncias la muerte desde el principio, tienes una visión trágica de la vida?

Hay cosas trágicas, pero no tengo esa visión, porque no creo que sepamos los finales de las historias, salvo el único gran final de que vamos a morir y sin embargo, seguimos viviendo.

Esa contradicción está presente en las tragedias griegas, donde te dicen quién va a morir, a quién le van a sacar los ojos, quién se va a acostar con su madre.

Estela dice «la niña va a morir» y eso produce la suficiente curiosidad, ¿pero qué pasa en las páginas siguientes? Limpia, refriega, corta una cebolla, cocina, piensa, reflexiona y cuenta su propia historia.

«Me entrené como se entrenan los deportistas para aguantar el dolor», dice Estela, y se convierte en la que «preparaba pollo a la cacerola», «limpiaba las costras de caca de la loza del guáter» y «recogía los pelos atorados en la boca abierta del desagüe.» ¿Por qué habla con esa crudeza?

Me sirvió leer «Las criadas», de Jean Genet, una obra donde las empleadas están enojadas y son muy irónicas.

Me parecía valioso que no tuviera los típicos sentimientos que tiene que tener: gratitud, cierta sumisión, tal como está retratada en la literatura latinoamericana. Me preguntaba ¿qué pasa si el personaje tiene otro tipo de voz y otra actitud?

Y así surgió Estela, que tiene un espesor reflexivo y que al mismo tiempo ironiza con las expectativas de cómo tendría que hablar alguien como ella.

Tiene rabia, también siente cariño y siente desesperación. Vive en una gran soledad y tiene una tremenda lucidez a la que también tiene derecho.

FUENTE DE LA IMAGEN – EDITORIAL LUMEN

La señora llega con un vestido nuevo y Estela se lo prueba a escondidas pero su jefa la descubre, y le dice «lávalo». ¿El contacto con su piel lo ha ensuciado?

Hay una violencia en hacer que otro haga la limpieza, pero que no vaya a ensuciarte. El racismo y clasismo que hay detrás de eso me parece brutal.

Hay un momento en que Estela ironiza sobre el hecho de que le moleste a los patrones que ella lave su ropa al mismo tiempo, en la misma carga de la lavadora.

Son cosas que uno ve: comer por separado, otro tipo de comida, microviolencias que están presentes en este tipo de relaciones tan verticales, gestos que hablan de una manera de ser de nuestros países y que todavía no se subvierten, por más que ha habido impulsos democratizadores.

¿Tuviste alguna vez una nana?

Desde que soy independiente y vivo sola o en pareja, no. Pero cuando niña, tanto mi papá como mi mamá trabajaban fuera de la casa, y esa figura estuvo presente en mi infancia.

Es un tipo de trabajo que lentamente ha ido cambiando, al menos en su lógica de puertas adentro, pero sigue existiendo mucha desregulación, donde el adentro y el afuera, el trabajo y el cariño, se mezclan de una manera ambigua, cercana al modelo hacendal.

Al llegar Estela se siente una extraña, pero de pronto eso cambia «cuando comenzó a pedirme que le lavara a mano sus calzones, a decirme Estelita, la niña vomitó, échale cloro al piso, por favor». ¿Es este tipo de relación a la que te refieres?

Ha habido cambios importantes al nombrar el trabajo como lo que es, porque ir a la casa de alguien a limpiar, cocinar y planchar es ir a trabajar con un horario, un contrato, condiciones que han sido conquistadas hace muy poco.

Estuve revisando la historia del sindicato, sus demandas; es impactante la lucha que han dado y terrible la exclusión que han sufrido dentro de las propias clases populares, porque su labor no era vista como trabajo.

Tengo la impresión de que el puertas adentro ha tendido a desaparecer y se ha ido formalizando, porque Estela no tiene horario y ella simplemente no sale nunca de su lugar de trabajo.

FUENTE DE LA IMAGEN – GETTY IMAGES

¿Estas trabajadoras le facilitan a otras mujeres la posibilidad de desarrollarse fuera de la casa?

¿Por qué lo verbalizamos de ese modo? Es como si la que explota a la trabajadora es la mujer porque sale, ya que la responsabilidad de la casa es suya, pero en realidad es una explotación de la familia como institución profundamente opresora.

Yo misma lo repetí, pero luego me quedé pensando: ¿por qué el marido sale sin culpa? Tiene que ver con una estructura patriarcal que al otorgarle ese rol a la mujer la obliga a ponerse en esa posición.

¿Y cuántas de las filósofas, las grandes académicas, han tenido que recurrir a esto para cumplir el deseo de ser madres y no renunciar a sus vidas intelectuales y profesionales?

Es una contradicción que está sin resolver, muy presente en ciertas clases sociales y en cierto tipo de mujer que ha podido insertarse a este sistema con un costo tremendo para otras, sin pagar correctamente, sin estimar el trabajo.

¿Los padres delegan parte de la crianza y cuidado de sus hijos a las nanas, porque hacerlo todo es insostenible?

No emito juicio respecto de que la crianza sea algo hecho en colectivo. Me parece una locura que la sociedad esté en una vuelta conservadora de exigirle a las familias y a las madres ser unas súper madres, que estén en la crianza mañana, tarde y noche. Es un retroceso gigantesco para las mujeres.

Aparece como algo liberador y deseado, pero no están las estructuras para apoyar a las mujeres ni a las familias. Se les impone una exigencia brutal de ser no solo esposas y madres, sino trabajadoras excepcionales, ganar sus propios sueldos y ser exitosas profesionalmente mientras crían al 100% del tiempo.

Es necesario que la sociedad se haga cargo de la crianza también, establecer lazos comunitarios con la familia y fuera de ella a través de las instituciones, devolverles la confianza.

La demanda me parece irrealizable y profundamente machista, y se le está dando una vuelta de tuerca como si fuera feminista, con cosas que son armas de doble filo.

Siento que, en los años 80, las madres llevaban a sus hijas e hijos a salas cunas y a jardines infantiles con menos culpa que ahora.

Es tramposo y recomiendo la lectura del libro de Lina Meruane «Contra los hijos», sobre las exigencias neoliberales respecto de la maternidad.

FUENTE DE LA IMAGEN,©LORENA PALAVECINO PENGUIN RANDOM HOUSE

La niña también está muy exigida: debe tocar el piano, ser un as en matemáticas, valiente en la piscina… ¿El hijo como trofeo o manifestación de éxito de sus padres?

Es una niña totalmente atrapada, como sus padres, en exigencias de perfección y de éxito que ya caen sobre ella desde antes de nacer; es una especie de producto neoliberal también.

Sufre tremendamente y está angustiada, desesperada, y eso se manifiesta en cuestiones físicas como comerse las uñas, los padrastros y las cutículas y otros actos de violencia hacia su propio cuerpo que yo quise trabajar porque lo veo.

¿Dónde lo ves?

Veo, veo ansiedad, veo a padres angustiados y a hijos angustiados. He visto a niños que se sacan el pelo y que se dejan pelones en la cabeza. ¿Qué es esa ansiedad? Son seres vulnerables.

La niña por un lado es completamente insoportable y a la vez produce una gran angustia y una gran ternura, porque es frágil, pero sigue siendo el producto de sus padres y de esta sociedad, y es una especie de protopatrona desde la primera infancia, pero con toda esa autoagresión.

Me parecía interesante tratar una infancia más gris, porque suele ser abordada desde la pura inocencia.

La niña no come. ¿Es la manera que tiene de rebelarse?

Es desesperación, porque la rebelión requiere un poco más de conciencia. Son maneras de llamar la atención y mandar señales de alerta, de expresar una desesperación que está no vista, porque esa niña no es vista por sus padres.

FUENTE DE LA IMAGEN – GETTY IMAGES

«Una niña infeliz, una mujer que aparenta y un hombre que calcula», observa Estela. ¿Es la única que ve a la niña?

Efectivamente, la está mirando y es consciente de su soledad, algo que era bonito de explorar.

Está la idea de que una trabajadora doméstica está ahí, en la casa, y es tratada como si no tuviera ojos, como si no tuviera voz.

Me parecía desafiante que mirara con atención y lucidez, porque lo que se ve debe ser muchísimo. Es el tras las cámaras de una familia, el tras las cámaras de la sociedad: el sexo, la suciedad, la violencia, la exigencia, las pastillas de la patrona, las ratas.

Todo lo ve, ve la podredumbre.

También ve a la niña y empatiza, la quiere y sin embargo, no la quiere, me interesaba ese vaivén y explorar la posibilidad de un sí y un no verdadero.

Entonces, la que se rebela es Estela…

Su voz exuda rebelión, porque ella sí está consciente, y creo que es algo que resulta especialmente aterrador para algunas personas: la posibilidad de una trabajadora doméstica con este nivel de conciencia social, aterrador.

Como es habitual, ella tiene un dormitorio al lado de la cocina -«ahí viví yo durante siete años, aunque nunca, ni una vez, la llamé ‘mi pieza'»-. ¿Por qué se queda tanto tiempo en una casa que no es la suya?

Leí varios testimonios y trabajos académicos sobre trabajadoras puertas adentro en Chile y me llamó la atención este irse quedando.

Podría ser un trabajo temporal, pero está mal pagado, no es posible ahorrar, entonces dejarlo es difícil y para mujeres que no son de la ciudad implica pagar un arriendo.

FUENTE DE LA IMAGEN – GETTY IMAGES

Para la protagonista, el trabajo se va volviendo una trampa.

Estela se va quedando porque como le dice su madre es una trampa, no es por voluntad, ni porque esté contenta, es un camino para ayudar a su familia; lo vemos en los migrantes ahora, son caminos para ganarse la vida, pero ¿qué pasa con la propia? La pregunta es desoladora.

¿Y cómo son las bambalinas de la sociedad que observa a través de esa familia?

Ve una parte de la sociedad, porque es una familia burguesa contemporánea, no está en la familia popular ni en las familias de clase media.

Son profesionales jóvenes, exitosos, con dinero. Pero lo que está entrando por la ventana o por la televisión es un descontento hondisimo, que termina explotando, y que en Chile tuvo la posibilidad de canalizarse en un proceso constitucional y fracasó.

Entonces sigue ahí y es una bomba de tiempo.

Está muy tensa la sociedad chilena y no solo la chilena, estamos viviendo en un modelo insostenible que nos conduce colectivamente a la muerte. El descontento está en América Latina, está en Europa, en Estados Unidos, en todas partes, el modelo bajo el cual vivimos no da más.

«Limpia» es una palabra de muchas lecturas, ¿por qué la eliges?

Está el rol de limpieza de la mugre de otros; está la exigencia de ser pulcra, pero también es una orden: «¡Limpia!».

Incluso está la idea de un ser humano limpio, una exigencia que se le impone a la trabajadora, pero también a su patrona, el tener vidas sin impurezas, sin tropiezos.

Limpia contiene otra palabra: impía, que es la idea de pecar y transgredir.

Tiene algo misterioso, bonito, potente y algo violento también si se usa en otros sentidos: cuando se habla de limpieza étnica, que es un eufemismo del asesinato de quienes no pertenecen al mismo grupo; cuando se habla, como ocurre en Chile, de limpiar las calles, expulsar a vendedores ambulantes, personas sin casa o migrantes; aquellos que la sociedad califica como prescindibles o indeseables, y en ese sentido, como «sucios».

En la idea de limpieza hay una violencia radical, oculta un deseo de pureza que niega lo mezclado y lo impuro o sucio en la propia identidad.

Y a pesar de que todos conocemos el final de la vida, ¿cómo logramos seguir viviendo?

Nos hacemos las locas y los locos. Si no, sería invivible. Nos hemos negado a la muerte y tal vez si nos negáramos menos, tendríamos una relación más sana con la vida.

Antes las personas sabían que iban a morir, morían en sus casas; ahora, ¿quién muere en su casa? Se muere más en el hospital, entubado.

Si la muerte formara parte de la vida como una cuestión menos terrible, me pregunto si no incidiría positivamente en nuestro vínculo con el cuidado, con la naturaleza y en nuestros vínculos con los demás también.

BBC Mundo habló con Alia Trabucco en el marco del Hay Festival Cartagena de Indias, que se celebra del 26 al 29 de enero.

Imagen de portada:©LORENA PALAVECINO PENGUIN RANDOM HOUSE

Este es el tercer libro de Alia Trabucco.

FUENTE RESPONSABLE: Diana Massis 

HayFestivalCartagena@BBCMundo 24 enero 2023

Sociedad y Cultura/América Latina/Chile/Colombia/Empleo/ Explotación laboral.

Daniel Barenboim, 80 años de un músico que ha puesto a pensar al mundo.

Pianista, director de orquesta y ópera, pedagogo, pensador y activista por la paz. No cabe duda de que Daniel Barenboim, por calidad y cantidad, es un caso excepcional en la historia de la cultura.

Daniel Barenboim, en el Teatro Colón de Buenos Aires.

Sí deseas profundizar en esta entrada lee por favor adonde se encuentre escrito en color “azul”. Muchas gracias.

Daniel Barenboim es una de las grandes figuras de la música del siglo XX y lo que lleva corrido del XXI, cumple 80 años el próximo 15 de noviembre. Nació en Buenos Aires, hijo de Enrique Barenboim y Aída Schuster, ambos destacados pianista rusos que habían migrado a Argentina. Cuando Barenboim cumplió 10 años la familia se trasladó a Israel y desde 1954 puede decirse que es ciudadano del mundo, pues su actividad musical como estudiante y sobre todo como intérprete lo ha llevado infinidad de veces a todos los continentes. Su nombre es sinónimo de pianista, director de orquesta y ópera, pedagogo y pensador. En varias ocasiones ha estado en el centro de la tormenta por emitir sus opiniones acerca del conflicto entre Israel y Palestina, y también por haber ejecutado óperas de Richard Wagner (incluso en el Festival de Bayreuth) y haberlo presentado en Israel, donde se le acusó de fascista y pro-nazi. Además, junto con el pensador palestino Edouard Said creó a West-Eastern Divan Orchestra, que reúne músicos de Israel, Palestina y otras naciones árabes, lo cual también le ha generado críticas en los dos bandos, hasta el punto de que la sede de la orquesta está en Sevilla, España.

La trayectoria y los grandes aportes de Barenboim como pianista, director de orquesta y ópera, pedagogo, pensador y gestor cultural es tan rica y variada que lo más sensato es compartir aquí el link de su página oficial y el de la Fundación Barenboim-Said.

Para hablar de la trayectoria de Barenboim, CAMBIO contactó a David Feferbaum, miembro de la comunidad judía de Colombia, para conocer no solo su opinión del músico sino también del personaje que ha estado sometido a críticas por sus opiniones acerca del conflicto entre Israel y Palestina. Ingeniero químico de profesión, David Feferbaum es un compositor de música electrónica, melómano y estudioso de la historia de la música, además de haber sido gestor cultural y colaborador de la Radiodifusora Nacional de Colombia (hoy Radio Nacional), donde presentó una muy recordada serie sobre la historia de la música del siglo XX.

David Feferbaum, en una presentación con su sintetizador análogo.

CAMBIO: ¿Cuáles aspectos destaca de la carrera como músico de Daniel Barenboim?

David Feferbaum: La respuesta no es fácil. Barenboim ha estado actuando por más de 70 años. Desde 1950 hasta 2022, cuando anuncia su “retiro por ahora”, ha sido uno de los pianistas y directores de orquesta de mayor relevancia en el entorno internacional. Actividades a las que habría que agregar la de “pensador” de la música (hay quienes lo califican como filósofo), a través de sus numerosas charlas y publicaciones; y la de “docente”, con sus clases magistrales, muchas en los medios masivos, y sus ciclos de programas, como los de 1970 para conmemorar el bicentenario de Beethoven. Sin omitir su significativo aporte a la causa del entendimiento. Cualquiera de estas actividades le asegura a un artista una posición en el devenir musical.

CAMBIO: En su concepto, ¿cuál es el verdadero fuerte de Barenboim? ¿Pianista? ¿Director de orquesta? ¿Sus aportes como gestor cultural y sus posiciones en favor de la paz y el entendimiento?

D. F.: De alguna manera, mi respuesta anterior tiene implícita la de este punto. Hay artistas cuya actividad es difícil de cuantificar. La actividad de Barenboim como pianista sería la de un profesional totalmente dedicado a ello, sin ninguna otra línea complementaria o paralela, aunque sea usual que los intérpretes integren la docencia a su rutina. Sin embargo, su actividad como director de orquesta es igualmente comparable, si no más intensa que la de muchos directores dedicados exclusivamente a ello. Y, en su caso, se suma que también ha sido un importantísimo gestor cultural, un gran docente y un entusiasta promotor del entendimiento y la paz, todo dentro de la vivencia musical. Como dijo alguien al comentar su retiro, “Barenboim es y fue la música, ese es su fuerte”.

CAMBIO: ¿Cómo hizo un músico que nació en Argentina y se trasladó en 1952 a la aún naciente Israel para destacarse en un medio tan competido como la práctica musical en Europa?

D. F.: En el caso de la música, salvo contadas excepciones, el hecho irrefutable es que la calidad, la profundidad y la novedad se imponen y llevan al reconocimiento. A partir de la Segunda Guerra, la “globalización” de los artistas se hizo realidad, mucho antes que los acuerdos de comercio. El desarrollo de innumerables concursos ha facilitado la identificación de grandes talentos. Hacia los años 50, todavía en Argentina, cuando el niño Barenboim comienza a ser reconocido por figuras como Rubinstein o Arrau, o cuando a los 11 años lo audicionan y lo guían maestros como Fürtwangler o Markevitch hace que, antes de cumplir los 20, ya fuera un solicitado pianista y director y que, para 1967, la Orquesta Inglesa de Cámara lo invitara a dirigir una serie de conciertos que lo lanzan a un estrellato que consolidará con todas las grandes orquestas del mundo.

CAMBIO: Usted, como miembro de la comunidad judía en Colombia, ¿cómo ve las posturas que ha adoptado Barenboim con respecto al conflicto entre Israel y Palestina?

D. F.: El conflicto entre Israel y Palestina es muy complejo y la postura de Barenboim al respecto no solo es interesante sino importante. Llama la atención su postura de que, palabras más, palabras menos, “olvidemos los políticos mientras cada uno de nosotros pueda hacer su mayor esfuerzo para apoyar y promover la paz entre los dos pueblos”. Resultado de ello su propuesta de crear, en asocio con el académico palestino Edward Said, la Orquesta West-Eastern Divan, que convoca a músicos de ambas partes y otras nacionalidades como una alternativa de integración.

Daniel Barenboim.

CAMBIO: ¿Cómo analiza usted el hecho de que Barenboim haya llevado a Israel la música de Wagner?

D. F.: Sí, este, como otros aspectos de la cultura alemana asociados con el nazismo, llevan a la pregunta de cómo son aceptados en Israel. En el caso de Wagner, muchos judíos que por razones emocionales muy válidas asocian su música con el nazismo y, en consecuencia, con el Holocausto, encuentran muy difícil su audición. Sin embargo, en mi opinión, Wagner fue usado por el nazismo como un medio musical para demostrar la “supremacía aria”, al tiempo que vetaba y perseguía toda la creación de músicos judíos que, para esos años, había consolidado en buena parte la música germana como líder del desarrollo. Tal es el caso Arnold Schoenberg, el mayor revolucionario de la música, cuyas innovaciones, él mismo decía, le aseguraban la supremacía a la música germana por otros mil años, lo que hasta ahora es válido.

Wagner no es responsable de que su música hubiera sido utilizada como leitmotiv del Nacional Socialismo, aunque sus descendientes sí se aseguraron de ser miembros activos del mismo y gozar de los beneficios que ello les reportaba. Al fin de cuentas y pese a que, humanamente hablando, no es que Wagner fuera un personaje de admirar, su obra no deja de ser una de las manifestaciones más sublimes de la historia de la música. Y es por ello que lo alcanzado por Barenboim, al lograr interpretarlo en Israel merece mi admiración. Su música no podía estar ausente en el repertorio de un país tan musical.

CAMBIO: Como músico, pero también como ciudadano, ¿usted cómo ve el proyecto de la orquesta West-Eastern Divan?

D. F.: Crear, desarrollar y posicionar una orquesta es de por sí un desafío enorme. Y Divan se ha consolidado ya como una orquesta importante dentro del medio. Que su objetivo sea promover el entendimiento entre israelíes y palestinos, además de músicos de otras nacionalidades a través de la expresión musical, es admirable. No obstante, el proyecto ha tenido oposición de uno y otro lado, al punto de que su sede está en Sevilla, España. El propio Barenboim la define: “Diván no es una historia de amor, tampoco una historia de paz. Muy halagadoramente se ha descrito como un proyecto de paz. No lo es. No va a traer paz, así toque bien o no tan bien. Diván fue concebida como un proyecto contra la ignorancia. (…) Estoy tratando de crear una plataforma donde las dos partes puedan estar en desacuerdo sin recurrir a cuchillos”.

La orquesta, que se ha presentado internacionalmente con rotundos éxitos e incluso nos visitó aquí en Bogotá hace unos años, ha tenido compromisos tan serios como el de tocar las nueve sinfonías de Beethoven en los famosísimos Proms de Londres. Creo que es un esfuerzo maravilloso y no tengo palabras para manifestar mi admiración. En 2015 el éxito de la West-Eastern Divan llevó a la fundación de la Academia Barenboim-Said en Berlín, que ofrece diplomas en música y humanidades, pensada especialmente para estudiantes del Medio Oriente.

CAMBIO: ¿Cuál podría ser el legado de Barenboim, en vista de que a comienzos de año anunció su retiro de la música por cuestiones de salud?

D. F.: Lo resumió la revista Gramophone, cuando en octubre de 2022 —al reanudar la adjudicación de los premios anuales, suspendidos desde tres años antes por causa de la pandemia— le otorgó a Daniel Barenboim el Lifetime Achievement Award en reconocimiento a su extraordinario legado como pianista, director de orquesta y de ópera, además de sus escritos y su ejercicio docente. Fue en este evento donde anunció su retiro por razones de salud, aunque dejó entreabierta una pequeña puerta. Algunos optimistas confiamos en que pueda darse su regreso activo a la música.

A raíz de este retiro Simon Rattle, el notable director, lo describió como «la personificación del logro de una vida… No puedo pensar en ningún músico clásico que no haya sido influido, inspirado o no haya aprendido de Daniel durante todos estos años, como músico o como filósofo, por el extraordinario trabajo que ha realizado con la Orquesta Divan [Oeste-Este]. Por supuesto, uno de los más grandes músicos de nuestro tiempo, tanto como pianista como director”.

Imagen de portada:Daniel Barenboim

FUENTE RESPONSABLE: Cambio Colombia. Por Eduardo Arias. 13 de noviembre 2022.

Sociedad y Cultura/Música/Genios virtuosos/Daniel Barenboim/Israel/Palestina/Homenaje/David Feferbaum/Entrevista

 

«Fue un capricho»: la historia de los 15.000 libros que el gobierno de Pinochet le quemó a Gabriel García Márquez.

El 28 de octubre de 1986, después de varios días de viaje, el Peban, un vapor de bandera panameña, atracó finalmente en el puerto chileno de Valparaíso. Mientras se preparaba para diligenciar los papeles de aduana, la tripulación recibió la noticia de que se procedería con la incautación de una parte del cargamento.

El capitán, que estaba seguro de que todo lo que llevaba en su barco estaba en regla, preguntó cuál era la mercancía que iban a retener.

La respuesta oficial fue la que menos esperaba: «Los libros», específicamente, 15.000 ejemplares de «La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile», escrito por el ganador del premio Nobel de Literatura Gabriel García Márquez que habían sido enviados desde el puerto de Buenaventura, en Colombia.

Y que debían llegar a manos de Arturo Navarro, el representante de la editorial Oveja Negra -que publicaba los libros del Nobel en aquellos años- en Chile.

El libro narraba las peripecias que había que tenido que sortear el cineasta chileno Miguel Littín, quien vivía en el exilio desde el golpe de Estado que llevó a Augusto Pinochet al poder en 1973.

Littín había vuelto a Chile durante dos semanas en 1985 para filmar en la clandestinidad un documental sobre lo que estaba pasando en el país 12 años después de la irrupción militar.

Arturo Navarro

Arturo Navarro era el representante de la editorial Oveja Negra en Chile.

Luego estrenaría el documental «Acta Central de Chile» en el Festival de Cine de Venecia del 86.

Pero el libro de García Márquez iba más allá: contaba sobre todo detalles que no aparecían en la cinta como por ejemplo el encuentro de Littín, quien se había hecho pasar por un empresario uruguayo, con el propio Pinochet en los pasillos del Palacio de la Moneda, donde el presidente de facto no lo reconoció.

«Yo me enteré de la incautación de los libros dos semanas después porque estaba fuera del país», recuerda Arturo Navarro tomándose un café bajo la nave central del Museo Nacional de la Memoria en el corazón de Santiago.

Navarro había regresado de un viaje por EE.UU. a visitar a su familia cuando se encontró con un mensaje de alerta en el contestador automático de su casa. Era de su agente aduanero y le describía una situación crítica: «Arturo, me dicen que los libros fueron quemados».

Arturo Navarro. Esto fue un capricho de Pinochet: no quería ver un libro, mucho menos después del atentado, en el que básicamente describen cómo le habían metido los dedos en la boca»

Para Navarro, el cargamento era fundamental: era el principal producto que esperaba exponer durante la feria del libro de Santiago, que se iba a celebrar pocas semanas después del incidente.

Él, que había sido empleado de la Editorial Nacional Quimantú (ampliamente perseguida por el régimen) y había visto a los militares ejercer la destrucción de libros en primera fila, también sabía que el régimen de Pinochet había flexibilizado sus políticas de censura.

En ese contexto, creyó que la incautación debía ser más un malentendido que un acto de represión y decidió viajar a Valparaíso para resolver el problema personalmente.

«El libro ya había sido publicado en capítulos en Chile por una revista (Análisis) meses antes», señala Navarro. «Sin embargo, lo que me preocupaba es que de acuerdo a la prensa, la incautación de los libros se debía al mal estado de los contenedores, que me parecía una disculpa inusual».

Portada revista Cauce

FUENTE DE LA IMAGEN – ARTURO NAVARRO. La noticia salió en varios medios locales.

Los ejemplares habían quedado bajo el control de la jefatura de Zona en Estado de Emergencia, a cargo de militares.

Cuando Navarro se acercó al edificio castrense donde podría intentar rescatar los libros, percibió de inmediato la tensión que se sentía dentro del gobierno por esos días: un mes y medio antes, el 7 de septiembre, militantes del Frente Patriótico Manuel Rodríguez habían estado muy cerca de acabar con la vida de Augusto Pinochet, en un feroz atentado cuando este regresaba a Santiago desde su residencia en el Cajón del Maipo, a unos 50 kilómetros de la capital.

El asalto había dejado cinco escoltas muertos y varios heridos.

«En el edificio logré hablar con un militar de rango medio al que le pedí que al menos me permitiera devolver los libros a Lima», señala. «Pero después de hacer un par de llamadas, finalmente me dijo ‘Navarro, no se preocupe, que los libros ya los quemamos'».

La versión en los medios se mantenía: contenedores en mal estado, lo que podría explicar la incautación, pero nunca la incineración.

Para Navarro era claro que la orden había venido de arriba y, aunque no tuviera pruebas, no se iba a quedar quieto hasta que la gente supiera que el régimen de Pinochet había mandado a quemar 15.000 volúmenes de nada menos que un premio Nobel.

Diario Neerlandez

FUENTE DE LA IMAGEN – ARTURO NAVARRO. La noticia apareció en el diario neerlandés NCR.

«Yo sigo sosteniendo que esto fue un capricho de Pinochet: no quería ver un libro, mucho menos después del atentado, en el que básicamente describe cómo le habían metido los dedos en la boca», afirma Navarro.

La noticia lo dejó abatido y sin ejemplares para la feria.

Entonces convocó a ruedas de prensa para dar a conocer lo que había pasado, hizo la denuncia pertinente ante la Cámara Chilena del Libro y aunque dentro del país no hubo mucho eco, en el mundo sí publicaron la noticia.

Navarro guarda recortes de prensa de medios de Grecia, Holanda y Estados Unidos que hablan de los ejemplares calcinados.

Pero quedaba por saber qué era realmente lo que había pasado. «Yo de verdad no creía nada de lo que me habían dicho. Ni siquiera que los habían quemado».

Uno de sus colegas le recomendó que el mejor camino para obtener una respuesta del régimen era la vía diplomática, por lo que decidió acudir a la embajada de Colombia, país de donde originalmente habían salido los libros.

«Ahí conocí a Libardo Buitrago, el cónsul colombiano, quien se ofreció a ayudarme».

Documento.

FUENTE DE LA IMAGEN -ARTURO NAVARRO. Este es uno de los pocos documentos donde el régimen de Pinochet aceptó que había quemado libros.

Poco después, gracias a la presión de un país extranjero, le llegó al cónsul un papel muy revelador, una carta fechada del 9 de enero de 1987, firmada por el vicealmirante John Howard Balaresque, en la que no solo se confirma la incineración de los libros sino también las razones: a los ejemplares de «La aventura de Miguel Littín clandestino en Chile» se les impuso «una medida de censura previa» por considerar que el contenido «transgredía abiertamente las disposiciones constitucionales».

«Ese papel es el único documento oficial que existe en el que el régimen de Pinochet acepta que quemó libros y que lo hizo por censura. Algo imposible de obtener en esos tiempos», relata Navarro.

«Y ahora está acá, en el Museo de la Memoria».

El documento, con firma oficial, le sirvió a la editorial Oveja para poder cobrar el seguro por la pérdida, pero además implantó en la cabeza de Navarro una certeza que no lo abandonó nunca más: la cultura sería clave en el fin del régimen.

«Esta represión a los libros, a la cultura, se daría vuelta y terminaría siendo uno de los principales motivos por los que Pinochet saldría del poder. Porque fueron los cantantes, los artistas, los escritores quienes serían fundamentales en la campaña de votar No en el plebiscito de 1988 que acabaría con la dictadura», concluye.

Imagen de portada: GETTY IMAGES. Augusto Pinochet se hizo con el poder en Chile mediante un golpe de Estado el 11 de septiembre de 1973.

FUENTE RESPONSABLE: Alejandro Millán Valencia; Enviado especial Santiago de Chile. 3 de junio 2022.

Sociedad y Cultura/Literatura/Chile/Colombia/Censura/García Márquez.

 

 

 

La fuga de Pablo Escobar, 30 años de una afrenta del narcotráfico a Colombia.

La fuga hace 30 años del jefe del Cartel de Medellín, Pablo Escobar, de La Catedral, la lujosa prisión que él mismo mandó construir en una montaña cercana a esa ciudad, es una de las mayores afrentas de Colombia, porque fue la demostración de que el narcotráfico permeó la política, la economía, la justicia, la Policía y el Ejército.

Así lo asegura en una entrevista con Efe el escritor Rafael Ballén, autor de La fuga de Pablo Escobar (Ícono Editorial), una novela que recoge ese episodio y que tiene como base una investigación que hizo cuando fue procurador delegado para las Fuerzas Militares.

En el libro podemos encontrar la «descripción de una sociedad corrupta como esa sociedad de los años 70, 80, 90. Fue una sociedad corrupta en todos los estamentos: las autoridades locales regionales y nacionales, en todas partes fue tocada esa sociedad por el dinero del narcotráfico», asegura el autor. 

En 270 páginas el autor también incluye la parte humana del líder político Luis Carlos Galán, asesinado en agosto de 1989, magnicidio atribuido por la justicia a una alianza del Cartel de Medellín con sectores políticos y agentes estatales contrarios a la figura de la extradición, que el político asesinado defendía. «Ahora, el jueves 21, se están cumpliendo los 30 años de la fuga, de esa afrenta que tuvo la sociedad y el Estado colombiano de ver cómo un señor había construido su propia cárcel, se había metido allí y vivía como un rey, con su gente, y hacía grandes bacanales y en el momento que quiso irse de La Catedral se fue«, dice Ballén.

El libro también recoge la relación de Pablo Escobar con las mafias de Estados Unidos, así como el cronograma de la fuga minuto a minuto, desde las 3.30 de la tarde del 21 de junio de 1992 hasta las 11.20 de la noche, todo contado por sus protagonistas.

Pablo Escobar Gaviria, el narcotraficante más temido de Colombia, se entregó a la justicia el 19 junio de 1991 y se fugó de La Catedral 405 días después, el 21 de julio de 1992. 

La Catedral, que antes era un centro de rehabilitación para drogadictos, fue ocupada por Escobar y nueve de sus más cercanos lugartenientes tras sellar un acuerdo con el entonces presidente colombiano, César Gaviria, por el que el jefe del cartel de la droga aceptó ir a la cárcel a cambio de que el Gobierno revocara un tratado de extradición con Estados Unidos.

Respecto a la fuga, «la opinión pública en este momento no sabe si fue a las 11 de la noche o fue al día siguiente, el 22. Realmente fue el día 21 a las 11 de la noche, cuando la neblina estaba muy espesa y se comía toda la luz de los faroles o de las bombillas que había alrededor de La Catedral», asegura Ballén, autor de más de una docena de libros entre ellos Cenizas, La vida ejemplar de Constantina y Travesías de sangre.

Tirofijo: De cuerpo entero y La fuga de Pablo Escobar hacen parte de una saga de cinco libros sobre el conflicto armado colombiano que Ballén, abogado y doctor en Derecho por la Universidad de Zaragoza, ha estudiado por más de 30 años.

Ballén recuerda que Escobar decidió dejar «su hotel de lujo» porque supo que el Gobierno colombiano lo iba a cambiar de sitio de reclusión al comprobar que seguía delinquiendo desde La Catedral, pues desde allí movía su emporio criminal, asesinaba a sus enemigos, recibía visitas de políticos, artistas, reinas de belleza y hasta jugadores de fútbol. 

La prisión, hecha a la medida del capo, le daba vista sobre Medellín, porque estaba en una montaña del caserío La Catedral, que hace parte de Envigado, ciudad cercana a la capital de Antioquía. Tenía lujosas habitaciones, múltiples salas de juegos, gimnasio, casas de muñecas, una cascada natural y hasta cancha de fútbol, todo con costosos acabados y cercada con malla electrificada, que hizo del lugar una fortaleza para el capo.

Según Ballén, antes de lo ocurrido en La Catedral, Colombia también sufrió otra afrenta, de la que se cumplen 40 años, pues sostiene que Escobar fue elegido congresista cuando se sabía que era narcotraficante, ya que en 1977 fue detenido por transportar 39 kilos de cocaína en el departamento de Nariño. 

Sin embargo, Escobar recorrió los pasillos del Congreso de la República al resultar elegido como suplente de Jairo Ortega, representante a la Cámara por el departamento de Antioquía (noroeste). «El país ha sufrido muchas afrentas (…) pero creo que la mayor humillación que tuvo Colombia en esos años fue su elección como congresista en el año de 1982», asegura Ballén.

Pese a las tres décadas de la fuga de Escobar y sus hombres, Ballén considera que los implicados en el caso deben decir la verdad de lo que pasó en esa época. «Muy bueno sería que se diga la verdad», subraya Ballén, quien insiste en que «la sociedad colombiana aguanta, acepta que se diga la verdad» para pasar esa oscura página de la historia con el compromiso de «trabajar por un Estado nuevo».

Imagen de portada: Pablo Escobar

FUENTE RESPONSABLE: Zenda. Apuntes, Libros y Cía. Editor: Arturo Pérez-Reverte. 25 de julio 2022

Sociedad y Cultura/Narcotráfico/Colombia

 

Aumentan los actos violentos por el «paro armado» del Clan del Golfo en Colombia.

Después de la extradición esta semana a Estados Unidos de alias Otoniel, la organización criminal que el lider narco dirigió, el Clan del Golfo, tomó represalias e inició un «paro armado».

En cuatro días que llevan los ataques violentos, se han reportado seis muertos y 180 vehículos atacados en diferentes carreteras del país.

En redes sociales han circulado fotos y videos de varias poblaciones en las que aparecieron grafitis alusivos a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC), como también se conoce a la organización criminal.

La prensa local, por su parte, compartió partes del comunicado firmado por las (AGC), en el que anuncian que en los departamentos de Antioquia, Chocó y Córdoba «todas las actividades sociales, económicas, educativas y culturales quedan suspendidas» hasta el próximo 10 de mayo.

Durante los ataques conocidos en Colombia como «paros armados», los grupos criminales bloquean vías, restringen la libre movilidad y envían mensajes amenazantes que obligan el cierre de establecimientos comerciales y la suspensión de clases en colegios y universidades.

GETTY IMAGES. Han empezado a aparecer grafitis alusivos a la organización criminal.

En respuesta a los hechos, el ministro del interior, Diego Molano, asistió a consejos de seguridad regionales en las zonas más afectadas.

Molano reveló que Wilver Giraldo, alias ‘Sipoas’, y Jesús Ávila Villadiego, alias ‘Chiquito Malo», asumieron el liderazgo del grupo criminal después de la captura de Otoniel en 2021.

Molano anunció, también, que han aumentado la recompensa por cada uno de los cabecillas.

Aunque no ha habido garantía de seguridad para los habitantes de las zonas más afectadas, el Ejercito ha empezado a escoltar caravanas de vehículos en nueve carreteras del país, con el fin de evitar que sean atacados por la organización criminal.

El Clan del Golfo

También llamado Autodefensas Gaitanistas, Los urabeños o Clan Úsuga, el Clan es una de las principales organizaciones criminales de Colombia y se dedica al narcotráfico y la minería ilegal.

De acuerdo con un reporte de la Policía Nacional y la Fundación Paz y Reconciliación, la organización criminal tiene presencia en 211 de los 1.103 municipios que hay en el país.

Se estima que más de mil hombres actuaban bajo el liderazgo de alias Otoniel, la mayoría de ellos exmiembros de la extinta guerrilla del Ejército Popular de Liberación (EPL) y las autodefensas.

Y eso tiene una explicación. El propio Otoniel hizo parte del EPL y, cuando este grupo guerrillero se desmovilizó en 1991, decidió cambiar de bando: se hizo miembro de las autodefensas que ocuparon la región de Urabá, en el noroccidente de Colombia.

Otoniel, cuyo nombre es Darío Antonio Úsuga David, fue extraditado esta semana a EE.UU y se declaró no culpable ante un fiscal federal en Nueva York, renunció a solicitar libertad bajo fianza y espera enfrentar un juicio con jurado.

Quién es Otoniel, el poderoso narcotraficante colombiano que fue extraditado a EE.UU.

GETTY IMAGES. Otoniel al ser extraditado a EE.UU.

Esta nota fue publicada con motivo del arresto de Otoniel en octubre de 2021 y actualizada ahora con su extradición a EE.UU.

raya

Este jueves, en su primera comparecencia en un tribunal tras ser extraditado a Estados Unidos, Otoniel, quien fuera el narcotraficante más buscado de Colombia, se declaró no culpable.

Dairo Antonio Úsuga David —su verdadero nombre—, el jefe del poderoso Clan del Golfo, está acusado entre otros cargos de «liderar una empresa criminal continuada» entre 2003 y octubre de 2021, cuando fue capturado en su país.

Y también de «participar en una conspiración internacional para fabricar y distribuir cocaína, a sabiendas y con la intención de que las drogas serían importadas ilegalmente a Estados Unidos».

Vestido con un mono de color naranja y con mascarilla y a través de su abogado, Arturo Hernández, renunció a solicitar su libertad bajo fianza mientras comienza el juicio y pidió que el proceso sea con jurado.

Otoniel, esposado y vestido con un overol de color gris, fue entregado este miércoles por la policía colombiana a agentes de EE.UU. y de la Interpol, que lo recibieron a bordo de un avión de ese país.

Fue detenido en octubre de 2021 luego de casi una década de intensa búsqueda.

«Colombianos, quiero informarles que ha sido extraditado Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel. Este delincuente es solamente comparable con Pablo Escobar, no solamente se trata del narcotraficante más peligroso del mundo sino de un asesino de líderes sociales, abusador de niños, niñas y adolescentes, asesino de policías y uno de los más peligrosos criminales del planeta», dijo este miércoles el presidente de Colombia, Iván Duque.

A Otoniel, de 50 años, lo detuvieron el año pasado en el municipio de Necoclí, en el noroeste de Colombia, en una operación conjunta en la que participaron más de 300 uniformados del Ejército, la Fuerza Aérea y la Policía Nacional desplazados en más de una veintena de helicópteros.

«Es el golpe más duro que se le ha propinado al narcotráfico en este siglo en nuestro país. Este golpe es solamente comparable con la caída de Pablo Escobar en los años 90», dijo entonces al celebrar la noticia el presidente Duque.

En 2015, las autoridades colombianas iniciaron un operativo para capturar a Otoniel en el que participaban unos 1.200 efectivos pertenecientes a los grupos élite mejor preparados del país, más del doble de los 500 que en su momento llegaron a estar rastreando a Escobar.

En cuanto al Clan del Golfo, el ministro de Defensa de Colombia, Diego Molano, dijo en octubre que se había convertido en los últimos años en «la mayor amenaza» debido a que «el mayor número de toneladas de coca que sacaba Colombia hacia mercados de EE.UU. y Europa era manejado y articulado» por esta organización criminal.

Según la prensa colombiana, contra Otoniel había una circular roja emitida por Interpol por homicidio múltiple, secuestro múltiple y concierto para delinquir, entre otros delitos. Además, es objeto de más de 120 procesos judiciales abiertos por todo tipo de delitos.

Otoniel subiendo al avión al ser extraditado

GETTY IMAGES. Hay más de un centenar de procedimientos jurídicos abiertos contra Dairo Antonio Úsuga David.

El traslado de Otoniel este miércoles a la base militar de Catam, anexa al aeropuerto internacional El Dorado, en Bogotá, tuvo características de espectáculo cinematográfico, con una caravana de tanquetas flanqueadas por decenas de policías en motocicleta.

Al bajar de una tanqueta en la pista aérea, se vio a un Otoniel esposado y encadenado de pies y manos, con chaleco y casco blindados, custodiado por decenas de agentes.

Una polémica extradición

La extradición fue posible después de que el Consejo de Estado, máximo tribunal de lo contencioso administrativo de Colombia, levantara una medida cautelar concedida a organizaciones de víctimas que querían impedir esa entrega a Estados Unidos, pues consideran que Otoniel debería responder primero por sus crímenes aquí.

Un militar junto a alias Otoniel.

FUENTE DE LA IMAGEN – REUTERS. La captura de Otoniel requirió un enorme operativo de seguridad.

Después de su captura, «Otoniel» declaró varias veces ante la Justicia Especial para la Paz (JEP), que juzga los crímenes cometidos por los distintos actores del conflicto armado, y suministró más de 60 nombres de militares, políticos, funcionarios y empresas que supuestamente tuvieron tratos con los paramilitares.

Por esa razón, desde diversos sectores se reclamaba que el jefe del Clan del Golfo no fuera extraditado tan rápido a Estados Unidos, pues se considera que aún guarda secretos y tiene mucha información que puede aportar a la justicia colombiana para ayudar a esclarecer crímenes del conflicto.

«Que afán tan impresionante el del gobierno de extraditar la verdad de Otoniel a USA. Muertos del susto. Los colombianos tenemos derecho a saber quienes son los cómplices de todos sus crímenes», escribió en su cuenta de Twitter el exministro de Interior Juan Fernando Cristo.

Sin embargo, el presidente Duque dijo hoy que la extradición no impedirá que los crímenes queden impunes en el país, pues «deberá seguir colaborando con las autoridades colombianas que lo requieran en sus investigaciones y pesquisas».

«Este bandido fue extraditado para cumplir las penas de narcotráfico en los Estados Unidos pero quiero dejar claridad que, una vez cumpla estas condenas, regresará a Colombia a pagar por los crímenes que cometió en nuestro país», aseguró Duque.

Alias Otoniel fue entregado en Bogotá a agentes de Estados Unidos

GETTY IMAGES. Alias Otoniel fue entregado en Bogotá a agentes de Estados Unidos.

Una historia de violencia

La vida de Otoniel puede verse como una acumulación de capas geológicas de la historia de la violencia en la Colombia de las últimas décadas.

Nació en Antioquia a principios de la década del 70 y a los 16 años se sumó junto a su hermano a las filas del desaparecido movimiento guerrillero Ejército Popular de Liberación (EPL).

Luego junto a su hermano Juan de Dios Úsuga David, alias «Giovanni», se vinculó a las FARC y más adelante, en lo que parece un giro de 180 grados, a los paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia.

En 2005 ese grupo se desmovilizó (dejó las armas), pero los hermanos se unieron a las filas del jefe narco Daniel Rendón Herrera, alias «Don Mario».

Don Mario, tras ser arrestado en 2009.

GETTY IMAGES. La captura de Don Mario dejó a los hermanos Úsuga David al frente del Clan del Golfo.

Cuando éste fue capturado en 2009, Otoniel y Giovanni quedaron a cargo de la organización.

Otoniel se convirtió en líder máximo cuando su hermano murió a manos de la Policía Nacional durante un asalto a una «narcofiesta» de fin de año, el 1 de enero de 2012.

De familia a cartel

Considerado como un gran cartel, el Clan del Golfo era conocido inicialmente como los Urabeños, por la región del Urabá donde opera, aunque sus tentáculos se extienden a gran parte del país y más allá (miembros del grupo han sido capturados en Brasil, Argentina, Perú, España y Honduras).

En su núcleo ha estado un clan familiar, los Úsuga, al que no solamente han pertenecido Otoniel y Giovanni sino también varios primos y otros familiares cercanos.

Helicóptero de la Policía de Colombia

GETTY IMAGES. La Policía de Colombia distribuía panfletos desde helicópteros para pedir ayuda a los ciudadanos para capturar a los líderes del Clan del Golfo.

Por ejemplo, Francisco José Morelo Peñata, alias «El Negro Sarley» (muerto en una operación policial en abril de 2013), tenía una relación sentimental con una de las hermanas de Otoniel, según la policía, y era el segundo de la organización tras la muerte de Giovanni.

La encargada de las finanzas del grupo era la pareja de Otoniel, Blanca Senobia Madrid Benjumea, alias «La Flaca», quien fue capturada en 2015.

Y quien era señalado por la policía como el contacto con los carteles mexicanos y el encargado de manejar la coordinación del tráfico de drogas hacia Centroamérica era un sobrino de Otoniel e hijastro de El Negro Sarley, Harlison Úsuga, alias «Pedro Arias», también apresado en 2015.

En agosto pasado, el gobierno de Colombia autorizó la extradición a Estados Unidos de Alexander Montoya Úsuga alias ‘El Flaco’, un primo de Otoniel que había sido capturado en 2012 en Honduras.

El departamento de Justicia de Estados Unidos ha calificado al Clan del Golfo como «una de las más importantes organizaciones de crimen organizado transnacional» que amenazan ese país.

Por otra parte, desde los tiempos en que eran conocidos como los Urabeños, el Clan del Golfo ha distribuido panfletos en los que se hacen llamar como Autodefensas Gaitanistas de Colombia, lo que es considerado por la prensa colombiana como un ardid para ocultar sus verdaderos fines.

Permanente evasión

Los fuertes vínculos familiares, así como su firme implantación en una zona de Colombia que conocen bien son algunas de las razones por la cuales a las autoridades les había costado tanto capturar a Otoniel.

Dairo Antonio Úsuga, tras ser capturado.

FUENTE DE LA IMAGEN – REUTERS. La detención de Otoniel requirió de la participación conjunta de varios cuerpos de seguridad del Estado.

En parte eso tiene que ver con la estrecha relación de su familia con Urabá.

Ellos son oriundos de la región, a la que los miembros del clan conocen bien.

Saben manejarse sobre su terreno y tienen poder sobre su población.

Tras la muerte de Giovanni, el clan decretó un paro armado que dejó estancada a la región por un par de días.

Pero Otoniel tenía también varios trucos para evadir a sus perseguidores.

Entre ellos, estaba el uso de perros criollos entrenados para que le den aviso cuando alguien extraño se aproxima, con tiempo suficiente como para poder escapar.

Iván Duque.

FUENTE DE LA IMAGEN – EPA. El gobierno de Iván Duque comparó la detención de Otoniel con la de Pablo Escobar.

En una de esas huidas tuvo que dejar atrás a uno de esos animales, un sabueso fino colombiano.

Los policías se lo llevaron, le dieron el nombre de Oto y lo entrenaron y lo usaron en el operativo de 2015 para que los ayude a buscar a su antiguo amo, cuyo olor se le hace inconfundible.

Además, de acuerdo con la prensa colombiana, Otoniel no usaba aparatos tecnológicos como teléfonos celulares para evitar ser rastreado, por lo que se comunicaba con los miembros de su organización enviando mensajes de voz que eran distribuidos en grabadores y memorias USB por correos humanos.

El temor a ser capturado lo llevaba también a cambiar constantemente el lugar donde pasaba las noches, usualmente en la selva y, con frecuencia, en chozas de madera.

Esas viviendas rurales contrastaban con los televisores de pantalla gigante, las bebidas costosas y los perfumes de lujo que las autoridades solían encontrar cuando le seguían los pasos.

Otro elemento distintivo de sus guaridas eran unos costosos colchones especiales, que le ayudaban a amainar las molestias de una hernia de disco.

Ahora que ha sido detenido no queda claro si podrá persuadir a las autoridades de que en la cárcel le permitan dormir en un colchón semejante.

Imagen de portada:GETTY IMAGES. Bus incinerado en Antioquia durante el primer día del «paro armado»

FUENTE RESPONSABLE: Redacción BBC News Mundo. Mayo 2022

América Latina/Colombia/Narcotráfico/Justicia/EE.UU.

 

 

Ángela García y una poesía del cuerpo.

La poeta Ángela García cofundó el Festival Internacional de Poesía de Medellín y actualmente organiza el encuentro por el Día mundial de la poesía, que se celebra en Malmö y Lund (Suecia). Este año obtuvo el premio Casa de América de Poesía Americana.

Personas del plural

No por devorar libros y otras

escrituras dirigidas a la inteligencia

nos facultan para leer otros signos.

Así, la instrucción tiene poca aplicación

en el cuerpo.

Vamos muriendo sin saberlo.

Nos sonreímos, lo cual hace soportable

la rudeza del mutismo.

Con sonrisa abanicamos el esplín.

***

La poesía de Ángela García atraviesa su cuerpo. Desde niña tenía una agenda en la que escribía y que, luego, en la adolescencia, cuando se hacía consciente de su propia identidad, de que esta era y es como una escritura constante sobre borraduras, le permitía conocerse y delinearse a sí misma. Piensa que la escritura y la literatura son sinónimos, aunque no siempre “la escritura termina siendo la literatura que uno quiere hacer, pero es ese proceso. El objetivo de la escritura, al comienzo, es descubrirse. En esos primeros cuadernos escribía pensamientos que tenía y cuando luego los leía veía que ahí hay otra persona que los demás creen que es uno, y ese reconocimiento es muy grande, catapulta muchas otras cosas, te da vuelo. La escritura te permite ese reconocimiento del rostro propio, de tus visiones, es una herramienta de irradiación de los sentidos, de iluminación de algo que eres tú y que todavía no conoces, y ahí lo vas buscando”, dice García en entrevista para El Espectador.

Con el tiempo, esas anotaciones en su agenda se fueron volviendo proyectos literarios. Uno de los temas sobre los que escribía era la locura, la veía como una libertad ajena a las lógicas y los lenguajes convencionales; pero cuantas más hojas agotaba, descubría que esa mirada romántica sobre la locura era ingenua y empezó a relacionarla con el sufrimiento: “La marginalidad de un pensamiento siempre duele, ya sea la inconsciencia de la locura o el exceso de conciencia”, afirma.

Si le interesa leer más sobre literatura, le sugerimos la reciente entrega de: Historia de la literatura: “Frankenstein o el moderno Prometeo”

De hecho, alguna vez que se reunió con Nicanor Parra, el poeta le dijo que “de lo que se trata es de ser locos”. Se refería a la locura ya fuera a la manera del Quijote, es decir, una locura resultado de una sumatoria de historias como único destino para salvar la humanidad; o ya fuera como el Rey Lear: el exceso de conciencia que lo ensimisma en una especie de melancolía. “Como sea, pero hay que ser locos, me dijo él”, agrega García.

Después de la locura vendrían otros temas, como el cuerpo. Baudelaire, el ensayo de Jean Paul Sartre, la llevó a la obra del poeta moderno: “Baudelaire me impresionó y me asustó por descarnado y por duro”, dice, mientras piensa en el poema Una carroña, que le movió las fibras por “esa manera de describir la muerte y la descomposición: el resultado es que describe la vida, que no hay muerte, que tras de esa descomposición vienen las larvas y que ahí está otra vez la vida trabajando su nueva solución de caminos hacia otra manera de existir”.

La primera vez que parió y vivió el dolor del alumbramiento hubo un hito en su conciencia, el desgarramiento y la vida, la sangre y la ternura. Otro hito fue cuando empezó a practicar capoeira y el movimiento, la circularidad, la danza, la respiración y el sudor dejaron de ser algo inadvertido. García ve el cuerpo como el “centro del misterio de todas las grandes cuestiones humanas. Todo lo que cabe en el cuerpo me parece fascinante: cómo esa máquina tan misteriosa, tan extraña, tan perfecta, puede canalizar cosas tan abismales como la historia, el deseo, el futuro, las contradicciones, el dolor, los temores; todo está ahí, en el cuerpo: el mal, la muerte, la vida y también lo político”.

Su relación con el cuerpo se da en un camino de doble vía en el que el pensamiento, un pensamiento polifónico, se alimenta de este y viceversa: “En la creación se juntan diferentes identidades, hay una decantación de un diálogo que viene de atrás, de otras voces, de cosas que se han escuchado o se han leído. Es como un estuario: en la escritura vas desembocando al mar de una obra”.

A veces, para escribir, corre. Su cuerpo en movimiento es el camino hacia su escritura, dicho sea, hacia ella misma, pues “en ese hecho de sostener la respiración, de llegar a un ritmo regulado donde ya no piensas más, vienen unas soluciones a esas cosas que quedaron sueltas o quedaron mal dichas, a esas preguntas punzantes, espinosas. Tiene mucho que ver con el hacer vacío, cuando uno hace vacío todo sale más limpio, bañado”.

Si le interesa leer más sobre poesía, le invitamos a leer la entrevista: Piedad Bonnett y una casa que se desmorona entre el silencio

Las paredes de su casa, en Suecia, son bibliotecas. Lee en español, en sueco, en francés y en inglés. Y siempre regresa a Alejandra Pizarnik, Fernando Pessoa, Clarice Lispector, María Zambrano, Arthur Rimbaud, René Char. Y siempre, también, está buscando y captando imágenes o instantes, develando que “la vida es una alegoría de la búsqueda poética misma. Tú estás viviendo y de pronto sientes el llamado de algo, de una manera de la luz, de una conversación que oyes en un bus, en un tren, un movimiento del agua: cosas pequeñas que se vuelven definitivas en un texto poético”.

Imagen de portada: Gentileza de  Mia-Maria Lindberg

FUENTE RESPONSABLE: El Espectador. El Magazine Cultural.

Sociedad y Cultura/Colombia/Personajes del año/Literatura/Poesía/

Angela García

La literatura de García Márquez en un manual de la Universidad de Oxford.

Si deseas profundizar sobre este tema; por favor cliquea donde esta escrito en “negrita”. Muchas gracias.

La institución británica acaba de publicar un libro hecho por expertos mundiales en el realismo mágico del autor de “Cien años de soledad”. Este es un fragmento del capítulo escrito desde Tokio, sobre la influencia del Nobel de Literatura colombiano en Japón.

La prestigiosa Universidad de Oxford acaba de publicar El manual de Oxford de Gabriel García Márquez, libro que reúne a expertos mundiales sobre el escritor colombiano para presentar “un examen exhaustivo en inglés de su vida, obra y legado”, el primer trabajo de este tipo desde su muerte en 2014. Fue editado por quienes allí consideran autoridades sobre la literatura latinoamericana: Gene H. Bell-Villada e Ignacio López-Calvo. Así presentan la obra: “El volumen pinta un retrato rico y matizado de Gabo. Incorpora enfoques críticos continuos como el feminismo, la ecocrítica, el marxismo y los estudios étnicos, al tiempo que aclara aspectos clave de su trabajo, como su origen caribeño-colombiano; su uso del realismo mágico, el mito y el folclore; y sus opiniones políticas de izquierda”. (Recomendamos: Crónica de Nelson Fredy Padilla sobre García Márquez y su obsesión con la muerte).

Son 32 capítulos, uno de ellos escrito por nuestro corresponsal en Tokio, Gonzalo Robledo, sobre la relación del Nobel de Literatura con Japón, que reproducimos enseguida: (Le puede interesar. Video: La reconstrucción de los pasos de García Márquez en El Espectador).

Cien años de soledad y su influencia en Japón

La publicación en japonés de Cien Años de Soledad en 1972, marcó un hito en el mundo cultural del Japón y su influencia sigue vigente hasta hoy. Desde la literatura al cine, pasando por obras de teatro y películas de anime, la obra cumbre de García Márquez ha sido sido señalada como fuente de inspiración o reconocida como punto de inflexión profesional por destacados creadores japoneses.

Escritores como Kenzaburo Oe, Nobel de Literatura de 1994, o Natsuki Ikezawa, declararon abiertamente haber recibido una significativa influencia literaria de la obra cumbre del autor colombiano en la creación de aldeas o países periféricos que les sirven para cuestionar la historia oficial de Japón. Por otra parte, el realismo mágico ha sido señalado como la herramienta de Haruki Murakami para explorar la crisis de identidad individual de los japoneses nacidos después de la Segunda Guerra mundial.

La publicación en japonés de la obra de García Márquez sirvió además para sacar a flote coincidencias entre el realismo mágico y la temática y el estilo de muchas obras literarias japonesas escritas desde finales del siglo diecinueve, después de que Japón pusiera fin a más de doscientos años de aislamiento voluntario y el naturalismo importado de occidente empezara a desplazar a la literatura fantástica, nutrida de folclor y leyendas tradicionales.

Primera y única traducción en 1972

Una de las primeras obras literarias en español traducida al japonés fue El ingenioso hidalgo Don Quijote de La Mancha que, a finales del siglo XIX, se empezó a traducir y publicar, parcial y totalmente, de otros idiomas diferentes al español. A lo largo del siglo XX una docena de traductores ofrecieron su propia versión directa del español de la obra máxima de Cervantes y, en el siglo XXI, traducir el Quijote se ha convertido en un reto profesional para muchos hispanistas nipones. Por su parte, Cien años de soledad fue traducida directamente del español en 1972. Esa versión, revisada varias veces por su ya fallecido traductor, sigue siendo la única que leen los japoneses casi medio siglo después.

La idea de traducir Cien años de soledad al japonés se atribuye al hispanista Yoshio Masuda quien la recomendó a la editorial Shinchosha sugiriendo como traductor a su colega, el profesor Tadashi Tsuzumi (1930-2019). El traductor, que nunca conoció Colombia, se enfrentó al reto de traducir una novela inusual e innovadora en un idioma occidental cuyo primer contacto con Japón se remonta al siglo XVI cuando la evangelización de los jesuitas europeos dio lugar al llamado Siglo Cristiano (1549-1650).

En ese período Japón intentó iniciar un intercambio comercial con occidente y envió en 1613 una misión diplomática que por vía de Nueva España (México), visitó Cuba, España, Francia y el Vaticano. Durante el periplo, el cristianismo fue proscrito en Japón y algunos miembros de la comitiva nipona, que habían sido bautizados, prefirieron quedarse a vivir en el pueblo andaluz de Coria del Río, en el sur de España, donde sus descendientes llevan hoy el apellido Japón. Durante los siguientes dos siglos Japón sostuvo un comercio limitado con occidente, pero estuvo cerrado a los contactos con países hispanohablantes hasta la segunda mitad del siglo diecinueve cuando firma tratados comerciales y empieza una diáspora nipona que incluye el sudeste de Asia, Estados Unidos y México.

Ya entrado el siglo XX, los emigrantes japoneses viajan a países como Brasil, Perú, Bolivia, Argentina y Colombia. El contacto de estas colonias japonesas con su país de origen es anecdótico y solo hasta 1990, cuando Japón inicia una política de admisión de extranjeros descendientes de japoneses como mano de obra para sus fábricas, el idioma español empieza a figurar como un factor en las relaciones exteriores. El fútbol y la música salsa registran un auge, a la par del estudio del español en academias y universidades. Los medios de comunicación japoneses realizan reportajes sobre los países de origen de los nuevos inmigrantes y las editoriales publican textos de estudio de español y los diccionarios bilingües son actualizados.

Pero cuando Tsuzumi traduce Cien años de soledad, aún faltan dos décadas para ese apogeo de lo hispano. Tampoco existen los supermercados con productos latinos donde se pueden conocer en persona los sabores y los colores del trópico. Y por traducir en la era pre-internet, definir sustantivos que muy pocos japoneses habían visto en su vida, como “guayaba”, requiere una laboriosa búsqueda fuera del campo lingüístico.

Al estar Japón protegido cultural e ideológicamente tras la barrera de un idioma autóctono, hablado solo en el archipiélago, era apenas natural que para su versión de Macondo Tsuzumi recurriera a la domesticación del texto original. La gramática japonesa invierte las frases de idiomas occidentales como el español y la secuencia en la que aparecen los elementos de una escena es percibida por el lector nipón en el orden contrario al dispuesto por el autor. Si García Márquez nos introduce a Macondo en una especie de aterrizaje en el que vemos las veinte casas de “barro y cañabrava”, luego el “río de aguas diáfanas” que se precipitan en un lecho de “piedras pulidas y blancas y enormes como huevos prehistóricos”, el lector de la traducción japonesa llega a Macondo navegando río arriba y lo primero que ve son las piedras. Según el traductor japonés, los huevos pertenecen a un “monstruo prehistórico” que no figura en el texto original. En versiones revisadas el “monstruo” fue sustituido por una “bestia”.

Tsuzumi usa la onomatopeya, un recurso lingüístico frecuente en el habla diaria de los japoneses para describir sonidos, acciones, texturas, estados de ánimo o situaciones. Las onomatopeyas japonesas pueden tomar forma de adverbios o adjetivos y se forman a menudo con sílabas repetidas. La abundancia de piedras que forman el lecho del río de Macondo se expresa con el sonido “goro-goro”, mientras que el tacto liso de esas piedras pulidas es “sube-sube”.

En el título del libro, el traductor prefirió dar un toque exótico usando el orden del español y puso los cien años al inicio de la frase: Hyakunen no kodoku, lo que en la gramática japonesa equivaldría a decir “La soledad de cien años”. Una traducción más doméstica del título hubiera sido Kodoku no Hyakunen.

Tsuzumi realizó al menos tres revisiones para las sucesivas ediciones. Los colegas más cercanos al fallecido traductor, elogian su amplio vocabulario que le sirvió para transmitir en un japonés rico y fluido el tono cercano y ameno de narración oral del texto original. La traducción de Tsuzumi sigue teniendo un papel importante en la difusión de la cultura de habla hispana en Japón y en la percepción de la cultura de América Latina, además de seguir influyendo en reconocidas creaciones artísticas posteriores a su publicación.

* Periodista y documentalista colombiano radicado en Japón. Se publica con autorización del autor.

Imagen de portada: La portada del nuevo libro sobre Gabriel García Márquez ​(1927-2014), Premio Nobel de Literatura 1982.

FUENTE RESPONSABLE: El Magazin Cultural. Por Gonzalo Robledo especial para El Espectador. Colombia.

Literatura/Novela/Realismo Mágico/Sociedad y Cultura/Colombia

Así es el Kyhytysuka sachicarum, el extinto reptil marino carnívoro identificado en Colombia.

Una nueva especie de ictiosaurio es identificada en Colombia. Recibe el nombre de Kyhytysuka sachicarum y vivió en el Cretácico.

Un grupo de investigadores colombianos, canadienses y alemanes unieron esfuerzos para hacer la descripción de un nuevo reptil marino carnívoro al que nombraron Kyhytysuka sachicarum. Este ejemplar llevaba años en exhibición en un museo de Colombia, sin embargo, nunca se le había identificado. Al examinar el cráneo de este animal, que mide aproximadamente un metro de largo y se remonta al periodo Cretácico, los expertos se dieron cuenta de que se encontraban ante una nueva especie de ictiosaurio.

Dirley Cortés, investigador afiliado al Departamento de Biología de la Universidad McGill en Canadá y coautor de la identificación, indicó:

“DECIDIMOS NOMBRAR AL ICTIOSAURIO POR UNA LENGUA INDÍGENA EXTINTA DE LA REGIÓN DONDE FUE ENCONTRADO. LO LLAMAMOS KYHYTYSUKA, QUE SIGNIFICA ‘EL QUE CORTA CON ALGO AFILADO’, PARA HONRAR A LA CULTURA MUISCA”.

Detalle del Kyhytysuka sachicarum. Imagen: Dirley Cortés.

Una especie con características únicas

Los investigadores describieron a esta nueva especie de ictiosaurio tomando en cuenta una docena de características anatómicas de la mandíbula inferior, la región nasal y la dentición, la cual tiene particularidades únicas. El ejemplar poseía diferentes zonas de mordida que podía usarlas para atrapar, perforar, cortar y finalmente aplastar presas grandes sin esfuerzo alguno.

Al respecto, Hans Larsson, director del Museo Redpath de la Universidad McGill, explicó:

“ESTE ANIMAL DESARROLLÓ UNA DENTICIÓN ÚNICA QUE LE PERMITIÓ COMER PRESAS GRANDES. MIENTRAS QUE OTROS ICTIOSAURIOS TENÍAN DIENTES PEQUEÑOS PARA ALIMENTARSE DE PRESAS PEQUEÑAS, ESTA NUEVA ESPECIE MODIFICÓ EL TAMAÑO Y EL ESPACIAMIENTO DE SUS DIENTES PARA CONSTRUIR UN ARSENAL DE DIENTES PARA FINIQUITAR PRESAS GRANDES, COMO PECES GRANDES Y OTROS REPTILES MARINOS”.

Cómo era la Tierra cuando esta especie vivía

Según los investigadores, este nuevo reptil marino carnívoro procede de una época en que la Tierra salía de un periodo relativamente frío, el nivel del mar estaba en aumento y el supercontinente Pangea se dividía en masas terrestres en el norte y sur.

Además de ello a finales del Jurásico se produjo una extinción global que cambió por completo los ecosistemas marinos y terrestres.

«A MUCHOS ECOSISTEMAS MARINOS CLÁSICOS DEL JURÁSICO DE ICTIOSAURIOS QUE SE ALIMENTABAN EN AGUAS PROFUNDAS, PLESIOSAURIOS DE CUELLO CORTO Y COCODRILOS ADAPTADOS AL MEDIO MARINO LES SUCEDIERON NUEVOS LINAJES DE PLESIOSAURIOS DE CUELLO LARGO, TORTUGAS MARINAS, GRANDES LAGARTOS MARINOS LLAMADOS MOSASAURIOS Y, AHORA, ESTE MONSTRUOSO ICTIOSAURIO», DICE DIRLEY CORTÉS.

Esqueleto de Kyhytysuka comparado con el de un humano a escala. Imagen: Dirley Cortés

Qué son los ictiosaurios

Los ictiosaurios tenían formas corporales muy parecidas a los delfines y fueron los contemporáneos marinos de los dinosaurios. Alcanzaron su mayor esplendor hace unos 210 millones de años (en el Triásico Superior), pero algunos perduraron hasta el Cretácico Superior. Desaparecieron unos 25 millones de años antes de la extinción masiva de los dinosaurios no aviares.

Si deseas saber mas de este tema, cliquea donde se encuentre escrito en “negrita”. Muchas gracias. 

La mayoría de ictiosaurios descubiertos alrededor del mundo miden entre 1,5 y 3,3 metros de largo, sin embargo, en el Reino Unido, en 2018, se halló un ejemplar de 26 metros. Casi la longitud de una ballena azul, según el estudio publicado en PLOS ONE donde se describía al fósil.

Imagen de portada: Gentileza de Dirley Cortés

FUENTE RESPONSABLE: NATIONAL GEOGRAPHIC en Español. Por Rodrigo Ayala. Diciembre 2021

Colombia/Dinosaurios/Ictiosaurio Kyhytysuka Sachicarum/Sociedad/ Investigación

El científico latinoamericano que resolvió un misterio genético gracias a un artefacto egipcio de 2.000 años de antigüedad (y por qué importa para el futuro).

Óscar Pérez Escobar: «La arqueo genómica es como una máquina del tiempo, donde uno tiene una oportunidad casi única de volver al pasado».

Es como una fascinante historia de detectives, le dice a BBC Mundo el investigador colombiano Óscar A. Pérez Escobar.

El científico de Kew Gardens, el Jardín Botánico de Londres, y sus colegas revelaron cómo fue siglos atrás la compleja «vida amorosa» de una planta.

Y lo hicieron gracias a un objeto que alguien enterró, hace más de 2.000 años, en un cementerio egipcio de animales momificados.

Descifrar los secretos genéticos de ese artefacto permitió develar cómo fue la domesticación de un cultivo que consumen millones de personas: la palma dátil.

Y esta información es crucial para el futuro, dijo el investigador.

El Dr. Pérez Escobar es uno de los autores principales del nuevo estudio sobre este hallazgo, que se publicó en la revista Molecular Biology and Evolution y fue fruto de un esfuerzo internacional. Los investigadores de Kew trabajaron en cooperación con 15 instituciones de cuatro continentes.

El estudio es una aplicación de la llamada «arqueo genómica», una ciencia que el científico compara a una «máquina del tiempo».

Pérez Escobar habló con BBC Mundo sobre el hallazgo, su importancia ante el cambio climático y la vocación que descubrió entre orquídeas en los bosques de niebla de Colombia.

line

¿Dónde fue hallado el artefacto egipcio que reveló, como tú dices, «la vida amorosa» de esta planta hace miles de años?

El objeto que estudiamos fue encontrado en la necrópolis animal de Saqqara, en Egipto. El lugar es de gran interés arqueológico porque allí se han encontrado millones de animales momificados, entre otros artefactos, que han permitido entender los modos de vida y evolución de sociedades egipcias en diferentes períodos de tiempo.

Artefacto de 2.100 años de antigüedad de hojas de palma dátil

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

El artefacto de 2.100 años de antigüedad se encuentra actualmente en la Colección de Botánica Económica del Jardín Botánico de Londres, Kew Gardens.

El artefacto tiene una antigüedad de 2.100 años según análisis de datación de isótopos de Carbono-14.

Fue encontrado durante un expedición conducida en 1971 por la Sociedad de Exploración Egipcia (ahora Ministerio de Antigüedades Egipcias) y fue estudiado por primera vez por el botánico inglés Frank Nigel Hepper, quien estaba asociado a Kew en esa época. El objeto fue donado por la Sociedad de Exploración Egipcia a Kew para investigaciones científicas.

En el estudio describen el artefacto como misterioso. ¿Se sabe para qué se usaba?

Cuando se encontró el artefacto se pensó que era un tipo de soporte para respaldar la cabeza, pero no había registros parecidos de objetos con esa función.

Sin embargo, un objeto parecido encontrado en la misma localidad pero mejor documentado, indica que su verdadera utilidad era como sello de jarrones para almacenar líquidos.

Pirámide de Djoser en Saqqara

FUENTE DE LA IMAGEN – MANUEL LEHMANN

El objeto fue hallado en un cementerio de animales momificados en el gran complejo arqueológico de Saqqara, a unos 30 km al sur de El Cairo.

¿Podrías explicarnos lo difícil que fue y el esfuerzo que llevó extraer el material genético?

Fue un verdadero reto acceder el código genético de nuestra muestra arqueológica, que en el estudio llamamos «la palma dátil de Saqqara». En comparación con restos arqueológicos de animales, los tejidos de plantas usualmente no se preservan tan bien, especialmente a través de escalas de tiempo de miles de años.

Esto se debe principalmente a que los huesos tienden a preservar mejor el ADN y no se comparan a la cutícula o lignina de las plantas, que son barreras protectoras más débiles.

¿Cómo lograron secuenciar ese material genético?

Nos tomó experimentos equivalentes a un año de trabajo (conducidos en la Universidad de Potsdam, en Alemania) para poder obtener una representación útil del código genético de este objeto.

Tuvimos que secuenciar en repetidas ocasiones millones de fragmentos del ADN de la palma de Saqqara porque dada su antigüedad, el ADN estaba en un grado de deterioro bastante avanzado.

Esto se debe a que una vez separada, la hoja de la palma dátil utilizada para elaborar los sellos de jarrones en esa época, su código genético o ADN deja de repararse y comienza a romperse en millardos de fragmentos, o a reunir mutaciones artificiales en dichos fragmentos.

Los efectos de estos dos procesos se acumulan de manera exponencial a través del tiempo. Además, las hojas de palmas dátiles son muy ricas en fibras, las cuales no almacenan tanto ADN como tejidos más suculentos como semillas u hojas de otros cultivos como el olivo o maíz.

Nadie había extraído ADN de tejidos antiguos de palmas hasta ese entonces.

Óscar Pérez Esobar y sus colegas del Jardín Botánico de Londres Mark Nesbitt, Sidonie Bellot, Philippa Ryan y Natalia Przelomska

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

Los investigadores de Kew trabajaron en cooperación con 15 instituciones de cuatro continentes. De izq. a der. Óscar Pérez Escobar, Mark Nesbitt, Sidonie Bellot, Philippa Ryan y Natalia Przelomska en la Colección de Botánica Económica de Kew.

¿Qué descubrieron sobre la historia de esta palma?

Nuestro estudio reveló por primera vez que la palma dátil que consumimos hoy en día tuvo una relación amorosa con otras dos palmas cercanamente relacionadas (conocidas como la palma azúcar – Phoenix sylvestris – y la palma de Creta – Phoenix theophrasti), que actualmente ocurren en diferentes lugares a los que la palma dátil ocupa. (La palma de Creta se encuentra en zonas costeras de Creta y Turquía, y la palma azúcar es una especie asiática que ocurre en Bangladesh y desde el sureste de India a Nepal, Pakistán y el Himalaya Occidental).

¿Cómo llegaron a cruzarse esas especies?

Una hipótesis es que fueron facilitadas por el hombre a través del comercio. Otra hipótesis es que las otras palmas compartían rangos de distribución con dátiles, pero luego con el cambio climático su distribución cambió, y se aislaron completamente sus rangos.

Gracias al ADN extraído del sello del jarrón nosotros podemos asegurar con certeza que estas relaciones amorosas ya habrían ocurrido 2.100 años atrás.

¿Por qué es tan importante descubrir con qué especies cruzó la palma de Saqqara en el pasado?

Esto es super interesante porque nuestro estudio nos muestra que la vida de las plantas es mucho más complicada de lo que parece, y algunas veces involucra otras especies que no tienen ninguna utilidad aparente para el ser humano.

Pero esas especies pueden guardar en sus códigos genéticos el secreto para resistir condiciones climáticas adversas o enfermedades, gracias a genes que usualmente se pueden perder en el proceso de domesticación de un cultivo.

Hombre trepado a una palmera cargada de dátiles

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

Saber cómo fue la domesticación de la palma de Saqqara ayudará a producir dátiles más resistentes al cambio climático.

Revelar la domesticación de cultivos de hace miles de años puede ser entonces clave para enfrentar el cambio climático…

Conocer de dónde vienen las plantas que actualmente consumimos y el modo y tiempo de su domesticación es de vital importancia para el mejoramiento de estos mismos cultivos, especialmente en las condiciones en las que vivimos actualmente con un clima que está variando muy rápidamente.

Saber de dónde vienen estos cultivos es esencial para encontrar parientes silvestres con genes que podrían ser de utilidad para producir cultivos bajo condiciones climáticas agrestes, o bajo la presión de enfermedades emergentes.

En el caso de nuestro estudio, saber que la palma compartió genes con especies cercanamente relacionadas es realmente útil porque esto nos indica que, cuando fuese necesario, habría oportunidad de producir dátiles más robustos frente a climas áridos o que tengan mayor producción de frutos por planta, mediante el cruce de cultivares de palmas dátiles y especies cercanas.

Gentileza Óscar Pérez Escobar junto a su colega Diego Bogarin

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

Óscar Pérez Escobar (der) junto al botánico Diego Bogarín de Costa Rica, otro de los autores del estudio.

El estudio que realizaron es una aplicación de arqueo genómica. ¿Qué es exactamente esta ciencia?

La arqueo genómica ha sido increíblemente útil, por ejemplo, para entender fenómenos como la relación entre humanos y neandertales.

Básicamente consiste en acceder a fragmentos del código genético de restos de plantas o animales preservados en condiciones especiales (facilitados por climas especialmente cálidos y secos, o preservados de la luz solar).

El trabajo de arqueo genómica en plantas es un poco parecido al trabajo que hace un detective al compilar evidencia cuando hay sospecha de un evento inusual.

En el caso de la palma dátil, estudios anteriores ya indicaba que tenía parte de su ADN compartido con la palma de Creta, pero no se sabía en qué momento esa relación amorosa había ocurrido. Gracias a la arqueo genómica logramos develar estos misterios y proveer una posible fecha sobre cuándo esos intercambios ya habían ocurrido.

¿Cuán reciente es la arqueo genómica y en qué medida ha sido posible por la revolución en técnicas de secuenciación?

El acceso al código genético de fragmentos de plantas o animales de cientos o miles de años de antigüedad se ha venido desarrollando desde hace dos o tres décadas. Pero en ese entonces, por limitaciones tecnológicas, era posible acceder a un número muy limitado de fragmentos de ADN y por lo tanto lo que podíamos aprender sobre un objeto particular era muy poco.

Ahora, gracias a la aplicación de secuenciación paralela de millones de fragmentos de ADN (lo que llamamos secuenciación de nueva generación o genómica en algunos casos) extraídos de fragmentos de plantas o animales antiguos podemos acceder a representaciones enteras del código genético de un individuo que existió cientos o miles de años atrás.

Artefacto de 2.100 años de antigüedad de hojas de palma dátil

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

Técnicas de secuenciación de nueva generación permiten descifrar genomas enteros de objetos de miles de años como el hallado en Saqqara.

Obviamente, dada la complejidad de los códigos genéticos de las plantas y el grado de deterioro de tejidos de plantas o animales de miles de años de antigüedad, esta es una labor que siempre es complicada.

¿La arqueo genómica está abriendo un nuevo mundo?

¡Yo diría que sí! La arqueo genómica es como una máquina del tiempo, donde uno tiene una oportunidad casi única de volver al pasado, en un período de tiempo dado y obtener secretos muy ligados a la existencia del ser humano, sobre las plantas o animales de los que dependemos.

El desarrollo de nuevas tecnologías en un futuro no muy lejano nos permitirá ir de manera fácil más allá del código genético y tener incluso una idea muy detallada, por ejemplo, del contenido proteico o nutricional de plantas de miles de años, las condiciones específicas de clima en que ocurrían o cómo era su apariencia física en gran detalle.

Semillas y partes de frutos de palmas dátiles de cerca de 2.000 años hallados por el arqueólogo Flinders Petrie alrededor de 1920 en Luxor, parte de la Colección de Botánica Económica en Kew Gardens

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

Semillas y frutos de palmas dátiles de unos 2.000 años hallados por el arqueólogo Flinders Petrie alrededor de 1920 en Luxor. «Estas semillas podrían ser potencialmente germinadas para rescatar genotipos extinguidos».

¿Podría tu trabajo aplicarse en el futuro a otros cultivos?

Uno de los cultivos en los que se podría aplicar arq genómica es el olivo (Olea europaea). En Kew hay colecciones preciosas de semillas que fueron encontradas ¡en el sarcófago del faraón Tutankamón! Adicionalmente, hay una gran cantidad de material con su código genético bien caracterizado al que se puede acceder de manera gratuita.

Actualmente el olivo es un cultivo que está tremendamente amenazado por una bacteria que está causando la muerte masiva de árboles en Italia, España y Grecia, y se estima que podría causar pérdidas enormes. La arqueo genómica nos podría ayudar a entender cuándo esta bacteria comenzó a afectar los olivos y si algunos genotipos en el pasado eran resistentes a dicha enfermedad.

¿Cuándo llegaste a Kew y cómo nació tu pasión por las plantas?

Yo trabajo en Kew desde hace cinco años. Llegué como investigador posdoctoral después de terminar mi doctorado en evolución y sistemática de orquídeas en la Universidad de Múnich, en Alemania.

Pero desde 2019 tengo la gran fortuna de trabajar como investigador líder.

Mi pasión por las plantas comenzó cuando aprendí de botánica durante mi pregrado en la Universidad Nacional de Colombia cuando tenía 17 años. Había salidas de campo a bosques de niebla en la cordillera Norte Andina, experiencias bellísimas.

Me fascinó en ese entonces saber cómo es posible que en espacios tan reducidos haya una densidad de plantas tan grande, y entender cómo han evolucionado a través de escalas de tiempo largas (millones de años) y más recientes (cientos a miles de años).

Óscar Pérez Escobar

FUENTE DE LA IMAGEN – GENTILEZA ÓSCAR PÉREZ ESCOBAR

«Mi pasión por las plantas comenzó cuando aprendí de botánica durante mi pregrado en la Universidad Nacional de Colombia cuando tenía 17 años».

¿Qué sientes hoy en día cuando tienes entre tus manos el artefacto egipcio de más de 2000 años que está revelando estos secretos?

Una gran curiosidad. Por ejemplo, no puedo dejar de imaginar qué tiempo tomó elaborarlo, qué tan valorado era. Son solo algunas de las preguntas que pasan por mi cabeza cada vez que visitó nuestra colección y veo estos objetos de miles de años de antigüedad.

Esos objetos deben guardar aún muchos secretos…

Un mensaje muy importante de nuestro estudio es que aún hay muchísimo por entender en cuanto al origen y evolución de las plantas de las que el ser humano depende. Se han invertido muchos fondos en investigación en las últimas tres décadas en palmas dátiles, un cultivo que representa millones de dólares en diferentes economías a nivel mundial, pero los vacíos de conocimiento que aún existen son grandes.

Por ejemplo, no entendemos con certeza todas las relaciones de parentesco de las 14 especies de palmas dátiles que existen en el mundo.

Así que, por más que algo parezca que ya está estudiado, ¡siempre hay algo nuevo por descubrir!

Imagen de la portada: Gentileza BBC News Mundo

FUENTE RESPONSABLE: BBC News Mundo por Alejandra Martins

Ciencia/Biología/Cambio genético/Investigación/Colombia