Juan Manuel
Juan Manuel calló. No le respondió. Se preguntaba qué hacía él ahí una y otra vez. Salió de su pensamiento, cuando Claudio;
-¿Y vos; porque estás acá?-
-Como bien lo dijiste vos hace un minuto, por boludo.-
-No; dejate de joder Juan Manuel -así te llamabas-; sabes que? ahora te vamos a llamar Guillermo Fernandez. ¿Y sabes cual es la razón?
-Ni idea; Claudio. ¿Cuál?
-Acá somos todos NN, somos desaparecidos no solo para nuestros familiares sino para toda la sociedad; la que no tiene ni idea de lo que está sucediendo.-
Y agregó -Sabes cuando me secuestraron uno de mis captores le dijo a alguien de arriba ““Ya cayó el pájaro en la jaula. Vamos camino al nido”. Estos hablan en código. Lo tienen todo bien aceitado.
-¿Y? ¿Qué tiene que ver eso con el cambio de mi nombre o apellido?-
-Porque si buscas; te vas a encontrar que no tenes documento alguno que acredite tu identidad. Que si tenes la suerte de contarla, vas a tener que dar explicaciones y lo peor, que no sabes a quién…- Entonces mejor preserva tu identidad verdadera; y yo te vuelvo a bautizar como Guillermo Fernandez. Está claro….¿Sí?- Ahora decime y fuera de joda. ¿Qué haces acá? ¿Que hiciste?-
-Es una larga historia Claudio; para hacerla breve solo te voy a decir que estoy acá -que en realidad no se donde estoy- por haber pretendido separarme de mi mujer.-
-Claudio estalló en una carcajada, a la que los otros se agregaron.- No lo puedo creer…-¿Decime cómo fue eso?- No pero antes voy a contestar a tu pregunta porque esta es la habitación de los “veteranos”. Nosotros también, usamos códigos. Y la llamamos así, porque los que estamos acá ya hace un tiempo largo que estamos chupados. Ahora con vos somos cuatro. Había otro compañero el “Vasco”, pero estos hijos de puta lo asesinaron y anda a saber donde se llevaron el cuerpo…a una fosa común seguro…Esta bien…no quiero que te arrugues…dale contame.-
-En una oportunidad tuvimos un grupo de tareas en nuestra casa; que se habían equivocado con el dato que alguien les dio…y mi mujer la pasó muy mal, pero parece que para evitar males mayores se dejó seducir por quien comandaba el grupo, a pesar de que los subversivos estaban en un departamento detrás de nuestra casa.-
-¿Y? No entiendo, replicó Claudio.-
-Nuestro matrimonio era un desastre desde hacía tiempo, pero mi mujer no quería separarse, me tuve que fugar de casa.-
-Es de no creer; generalmente es la mujer que se va de la casa.- le dijo Claudio.
-Sí; por lo general es así, pero es porque no conoces a mi mujer. Cuando la cité en un bar del centro, para arreglar la separación de buenas maneras ella insistió en continuar con el matrimonio. Cuando le dije más de una vez que no; hizo una seña apareció ese tipo con dos más…me golpearon, me encapucharon y acá estoy.-
-Y es lo que siempre le dijo a los muchachos; acá ninguno es ni subversivo ni terrorista ni ha cometido delito alguno. En mi caso tenía un amigo que sí lo era, estaba comprometido con el ERP. Y en cuanto a Daniel y Carlos; les sucedió lo mismo. Tenían amigos comprometidos con los grupos guerrilleros.- Así que fijate sin “comerla ni beberla”; acá nos dan turno para torturarnos y cometer vejaciones para que hablemos, cuando no sabemos nada de nada.-
Juan Manuel; ahora “Guillermo Fernandez” no podía creer lo que Claudio le decía. Un sudor frío recorrió su cuerpo. Las manos le comenzaron a temblar. ¿Qué estarían pensando su madre y sus hermanos?-
-Mira; quedate tranquilo, conocemos a la perfección la rutina de estos tipos, los cambios de guardia y en mi caso me familiarice con el exterior. Cuando me sacaban las vendas o la capucha, miraba a través de los vidrios de las ventanas. Si bien estaban pintadas con cal, estaban descascaradas en algunas partes….-
-¿Y, qué viste?-
-Los oídos por la percepción auditiva, me dio una medida de a cuánto estamos del ferrocarril; que es el Sarmiento porque es el único que cuenta con ocho vagones, y logre escuchar los ocho golpes dobles.-
-¿Entonces piensan en fugarse de alguna manera?-
-Shhh…habla bajo, que aca hasta las paredes escuchan. Es lo que venimos pensando. Hay que planearlo paso a paso.-
-¿Y decime; todos los días aparecen estos tipos para torturar e interrogar?-
-Sí todos los días. Pero sabes; algunos hablan con nosotros. Hasta hay uno que dice que no está de acuerdo con los métodos represivos empleados y que solo le ruega a Dios que los perdone.-
-¡Pero ese es un hijo de puta! ¡Como para decir eso!-
-No te creas; si no actúa como le dicen de arriba, no sería extraño que a pesar de integrar el grupo de tareas si se opone se convierta también en “boleta”. Acá no le tienen asco a nada-
-Pero no hay nadie que pare a ese hijo de puta…al que le dicen “Hugo” que es el que los comanda y te hace el verso para luego golpearte.–
-”Guillermo”, como se ve que no tenes una puta idea en dónde estás. Acá no existis. Nadie se va a enterar si te sacan con los pies para adelante. La violencia es constante e impredecible. Alguno amaneció mal y en una de esas te muelen a palos. ¿Me entendes?.-
-Entonces estamos en un mundo oculto o paralelo, subterráneo sin leyes ni protección de ningún tipo. Es como una fosa ya no somos personas – estamos vivos pero a la vez muertos para todos los de afuera.-
-Tal cual lo decis. Se ve que te llegó todo lo que te dije. Ahora vamos a dormirnos no bien apaguen las luces, porque ante cualquier murmullo estos tipos se ponen nerviosos y te podes imaginar…¿no?-
-De acuerdo Claudio…pero si no hacemos algo nos van a….-
-Shhh…callate, mañana si podemos hablamos con los muchachos.-
Continuará…